A un año de la muerte de la cantante irlandesa Sinéad O’Connor, quien falleció a los 56 años de edad; el diario Irish Independent reveló que la causa del deceso fue el agravamiento de una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y asma.
La artista dublinesa fue hallada muerta el 26 de julio del 2023 en su domicilio del sur de Londres, capital británica y ciudad a la que se había trasladado para vivir temporalmente desde su natal Irlanda.
Seis meses después, un juez forense del Reino Unido informó de qué O’Connor falleció debido a “causas naturales”, pero no dio más detalles al respecto. Incluso, esta instancia judicial en Reino Unido explicó que llevaría a cabo una autopsia para determinar las circunstancias de la muerte, después de que la Policía Metropolitana (MET) confirmó que no había rastros de un crimen.
El Irish Independent precisó que, de acuerdo con el certificado de defunción, la cantante padeció una “exacerbación de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y del asma bronquial, junto con una infección leve del tracto respiratorio inferior”.
Además de detallar que, el exesposo de O’Connor, John Reynolds, registró formalmente el fallecimiento de la cantante el pasado miércoles; por lo que la causa del deceso quedó registrada de manera oficial en el parte del caso.
Al respecto del caso del fallecimiento de Sinead O’Connor, AFP detalló hace unos meses que la justicia británica había determinado como ‘causas naturales’ el deceso y, luego de haber realizado una investigación judicial.
O’Connor, que adquirió gran fama con su canción “Nothing compares 2 U”, en 1990, fue encontrada inconsciente por la policía el 26 de julio en su casa en el sureste de Londres, refirieron los primeros reportes.
En un comunicado, el tribunal de Southwark, al sur de Londres, encargado de la investigación sobre la muerte de la cantante, confirmó que “la señora O’Connor falleció por causas naturales”.
Su muerte provocó una avalancha de homenajes en Irlanda y en todo el mundo; fue enterrada cerca de Dublín, tras una procesión fúnebre frente al paseo marítimo de Bray, una pequeña ciudad al sur de la capital, donde vivió durante 15 años.
O’Connor, que en 2018 anunció su conversión al islam, dio que hablar también por una serie de polémicas, desde revelaciones sobre maltratos de su madre durante en la infancia, hasta críticas a la Iglesia católica, con acusaciones por no haber protegido a los niños víctimas de abusos sexuales de religiosos.
En 1992, rompió ante una televisión norteamericana un retrato del papa Juan Pablo II y siete años después, protagonizó otra polémica cuando una iglesia irlandesa disidente la ordenó sacerdotisa.
La cantante fue desapareciendo del mapa público, aunque en 2005 regresó con su álbum de reggae “Throw Down Your Arms”, tras haber vivido un período en Jamaica y haberse acercado a las creencias rastafaris.
En los últimos años, Sinéad O’connor, se mostró activa en redes sociales, amenazando a sus antiguos socios con llevarlos ante la justicia, y hablando de sus problemas de salud física y mental e incluso de sus pensamientos suicidas.
Según sus agentes, antes de morir estaba terminando un nuevo álbum, Sinéad preparaba una gira y planeaba llevar a las pantallas su autobiografía, “Rememberings”, un libro publicado en 2021.
Con información de EFE y AFP.
