Como remedio de belleza, al clavo de olor le atribuyen beneficios para el crecimiento del cabello. Esto dicen las investigaciones respecto a sus 'poderes'.
Abundan los remedios caseros para curar males del organismo, como el té de manzanilla para desinflamar o el té de valeriana para ayudar a conciliar el sueño; pero no son los únicos, también hay alternativas para el cuidado del cabello, como el uso del aceite de coco o el aceite de oliva, que por sus propiedades prometen controlar el frizz o aportar suavidad. El clavo de olor es igualmente popular en este modo de uso.
El clavo de olor es de esos ingredientes inconfundibles en la alacena porque su forma refiere precisamente a los clavos convencionales, su aroma es muy duradero y por eso es imprescindible en la cocina mexicana tanto dulce como salada.
Al igual que con otras especias, las personas han encontrado nuevos usos para sacar el clavo de la cocina y probar su efectividad como truco de belleza.
El clavo de olor (Syzygium aromaticum) es un capullo de flor seco que no abrió. De acuerdo con McCormick Science Institute, el clavo de olor está compuesto en un 85% de eugenol, componente extraído del aceite generado por la especia; además contiene vitamina E, calcio y magnesio. Desde hace cientos de años se utiliza como anestésico en la medicina natural, pero no hay información suficiente para respaldar este uso.
En el mercado de productos para el cabello hay una amplia variedad de tratamientos que incluyen el clavo de olor, la mayoría de las veces en combinación con otros ingredientes naturales, la canela y el jengibre son algunos ejemplos y también es recomendado como aditivo en el shampoo de uso diario.
Según Medline, el componente estrella del clavo de olor es el eugenol por sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antimicrobianas, además contiene cariofileno y flavonoides, también presentes en el romero y la albahaca. A estos les atribuyen una mejora en la circulación sanguínea en el cuero cabelludo.
La principal duda sobre el uso del agua de clavo de olor, que resulta de hervir los clavos, en el cabello es si promueve el crecimiento. De acuerdo con Health News, en un estudio realizado en piel de conejos se hallaron resultados positivos en este sentido, sin embargo, no hay suficiente evidencia en humanos para aseverarlo.
La misma fuente apunta que los antioxidantes presentes en el clavo de olor tendrían que ver con este poderoso beneficio porque son los responsables de combatir el estrés oxidativo, un factor importante en la caída del cabello.
El estrés oxidativo se presenta cuando “hay demasiadas moléculas inestables llamadas radicales libres en el cuerpo y no hay suficientes antioxidantes para eliminarlas”, según los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos (NIH).
El clavo de olor sumaría como fuente de antioxidantes para reducir la pérdida de cabello por caída o rotura, aunque no es la única forma de obtenerlo y hacen falta investigaciones para determinar si su aplicación sobre el cuero cabelludo es igual de efectiva.
Si bien no hay una forma probada científicamente de usar el clavo de olor en el cabello, una de las sugerencias es triturar algunas piezas para liberar el extracto esencial, agregar el polvo en agua caliente y dejar reposar la mezcla de 15 a 20 minutos antes de aplicarlo, previamente colado, junto al shampoo.
Al no existir una dosis recomendada para estos fines, la primera recomendación de Health News es consultar a un profesional de la dermatología antes de probar la combinación porque podría ocasionar una reacción alérgica, irritación o resequedad en el cuero cabelludo.
Además es importante tener en cuenta que los resultados pueden variar de persona a persona por los distintos tipos de cabello.
