El president del Govern comparecerá en el Parlament en un pleno monográfico sobre el servicio ferroviario que la semana pasada colapsó en diversos puntos
Los perjudicados por el caos de Rodalies se organizan: “No me da la gana cambiar de vida para evitar el tren”
El mal funcionamientoi de Rodalies son un tema recurrente en Catalunya y con el que todos los gobiernos tienen que lidiar en algún momento. Pero la coincidencia de partidos hermanos en el Ministerio de Transportes y en la Generalitat, junto al proceso de traspaso del servicio de una administración a otra, ha convertido la cuestión de las cercanías catalanas en uno de los retos más difíciles para el Govern de Salvador Illa.
El president ha debido responder varias interpelaciones sobre Rodalies en la sesión de control de este miércoles, después de una semana en la que los problemas fueron prácticamente diarios y en diferentes puntos de la red. “El Govern resolverá esta situación”, ha prometido Illa, que sin embargo ha advertido que “no será fácil ni rápido”.
El jefe del Govern, que ha repetido en varios momentos las disculpas a los usuarios tal como ya hizo el viernes pasado, ha reconocido que la gestión tiene mucho “recorrido de mejora”.
Unas palabras que no han valido a los grupos de la oposición, que han ido desde la petición de dimisiones en el Ministerio por parte de ERC y la CUP a la reclamación de Junts de que Illa compareciera de forma urgente, que la Cámara ha rechazado por mayoría.
Sí se ha aprobado, en cambio, celebrar un pleno monográfico en el Parlament el próximo 25 de marzo, donde Illa deberá comparecer para dar explicaciones. Este mismo martes está previsto que las plataformas ciudadanas que han proliferado en varias líneas convoquen movilizaciones unitarias para el próximo día 22 de este mes.
Casi a la vez que Illa hablaba del margen de mejora en el servicio, el ministro de Transportes, Óscar Puente, respondía en el Congreso sobre la misma cuestión. Preguntado por ERC y Junts, el máximo responsable de las dos empresas que intervienen actualmente en el servicio de Rodalies, Adif y Renfe, aseguraba que la razón de los problemas en la red son, precisamente, las inversiones.
A juicio de Puente, los problemas que se han producido en Catalunya no tienen que ver con la falta de obras y mantenimiento sino precisamente con lo contrario. “Estamos realizando un volumen de inversiones muy difícil de compatibilizar con la prestación del servicio”, ha asegurado el ministro, que ha afirmado que desde el Ministerio “no se puede invertir más” porque, de hacerlo, haría imposible que los trenes circulasen.
“Llevamos 2.000 millones de euros de inversión en Rodalies desde que estamos en el Gobierno”, ha listado el ministro. La inversión prometida por el Ministerio la legislatura pasada, sin embargo, alcanzaba los 3.000 millones de euros hasta 2025, cifra que por el momento está lejos de alcanzarse.
Además, las incidencias registradas el fin de semana de carnaval en Sitges y que se extendieron a toda la R2Sud no tuvieron que ver con la infraestructura, sino fueron achadas por Renfe a la “conflictividad laboral”. Los trabajadores, en cambio, hablaron de mala planificación de la empresa.
