Con el paso del tiempo y el uso continuado, las fundas de los dispositivos pueden cambiar de color adquiriendo una apariencia desagradable, aunque es posible remediarlo con un sencillo método
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Con el paso del tiempo y el uso prolongado, las fundas de los dispositivos electrónicos -especialmente aquellas que están hechas de silicona- adquieren un color amarillento desagradable y difícil de tratar. Prevenir este contratiempo es casi imposible, ya que este tipo de decoloración es un proceso natural del material debido a la oxidación y la continua exposición al calor y la luz solar.
Sin embargo, pese a que el deterioro gradual es inevitable, es posible prevenirlo impidiendo que los protectores se echen a perder tan fácilmente y prolongando su vida útil durante el mayor tiempo posible. Te contamos cómo limpiar las fundas transparentes de móviles, portátiles y dispositivos electrónicos para que no amarilleen.
Limpiar las fundas transparentes de cualquier dispositivo electrónico no es un proceso complejo, ya que puede llevarse a cabo con tan solo algunos materiales de uso habitual durante la limpieza del hogar. Aun así, es recomendable preparar todos los productos necesarios antes de comenzar para facilitar aún más el proceso.
Serán necesarios los siguientes materiales:
Una vez reunidos todos los materiales, comienza preparando la zona donde se llevará a cabo el truco de limpieza. Para ello, llena un recipiente con agua tibia y añade unas gotas de detergente suave o jabón neutro.
A continuación, remueve la mezcla hasta que comience a salir un poco de espuma e introduce la funda en el agua con jabón durante al menos media hora. Esto permitirá aflojar el material y la suciedad incrustada en el mismo.
Una vez haya pasado el tiempo, retira la funda del agua y utiliza un cepillo de cerdas suaves o un cepillo de dientes viejo para frotar las áreas más sucias, como esquinas o recovecos. Estas zonas son las más amarillentas, ya que es donde se acumula mayor suciedad.
Tras ello, espolvorea bicarbonato de sodio con la funda aún húmeda sobre las zonas más decoloradas y vuelve a frotar con el mismo cepillo de antes. Este producto es un abrasivo natural suave, por lo que permitirá eliminar las manchas difíciles sin dañar la superficie.
A continuación, enjuaga de nuevo la funda en agua y jabón para retirar cualquier residuo sobrante y sécala con papel de cocina o un paño de microfibra. Para finalizar, coloca la funda al aire evitando la exposición directa a luz solar, ya que podría volver a dañarse, y retírala cuando no quede ningún resto de humedad.
Si el protector se encuentra muy sucio, puede que sea necesario recurrir al uso de otros materiales como el vinagre blanco de limpieza o el alcohol isopropílico. Respecto al primero, sumerge la funda en un recipiente con agua y vinagre a partes iguales y deja que actúe un cuarto de hora antes de comenzar a frotarla.
En relación con el segundo, el alcohol isopropílico es un potente limpiador. Si la funda se encuentra muy sucia, humedece un paño de microfibra con el compuesto y frota cada una de sus partes con intensidad hasta conseguir la apariencia deseada.
Las manchas amarillentas son casi inevitables en las fundas transparentes debido al material del que estas están hechas. Sin embargo, es posible tomar medidas que prevengan este tipo de decoloraciones.
Evita la exposición al sol siempre que sea posible, depositando la funda en lugares frescos y sombreados siempre que no se esté usando. Por otro lado, efectúa una limpieza como la indicada previamente con cierta asiduidad, cuando se comience a apreciar signos de decoloración.
En ocasiones, los materiales pierden sus propiedades con el tiempo debido al uso continuado, cambiando su forma y estética. Si tras una limpieza no es posible eliminar el color amarillo de las fundas por completo, o si no se está contento con el resultado final, puede que sea el momento de reemplazarla.
Cada material tiene unas características únicas, por lo que puede que otro tipo de fundas se adecúen más a tus gustos o necesidades. Cada tipo de funda será útil en diferentes contextos y ayudará a que tus dispositivos electrónicos estén protegidos durante el mayor tiempo posible.
