El otoño es una estación de tradiciones. Desde las ferias de productos típicos como las castañas de Pujerra, las setas de Navaleno, la alubia de Tolosa o el orujo en Potes, hasta celebraciones ancestrales como el Samaín en Galicia, el país se llena de fiestas que invitan a saborear la esencia de la temporada
Cuando el otoño hace acto de presencia los paisajes cambian de color, las temperaturas bajan y los charcos de lluvia dejan reflejos de árboles que se quieren desprender de sus hojas. Es una estación especial, en la que apetece bajar el ritmo y acercarnos un poco más a los aromas y sabores del terreno. Una época cargada de tradiciones, muy ligadas a la tierra y sus ciclos, y en la que históricamente siempre ha habido mucho que festejar.
A lo largo y ancho de la geografía española, este tiempo tan evocador da lugar a una gran cantidad de fiestas populares que celebran la esencia misma del otoño. Desde las cosechas y la gastronomía, hasta la historia y las creencias ancestrales, el país se viste de gala con festividades que permiten disfrutar de la cultura local, saborear los productos típicos de la temporada y vivir costumbres que han perdurado a lo largo de los siglos.
De manera que si viajamos un poco para descubrir esos ritos que giran en torno a la naturaleza, los frutos del campo y los eventos más populares, veremos que el otoño está cargado de celebraciones de todo tipo. Desde la famosa Fiesta de la Castaña en Pujerra hasta la Fiesta del Orujo en Potes, pasando por el fascinante Samaín en Galicia o las festividades dedicadas a las setas, encontramos una España que se entrega al ritmo del otoño y nos invita a ser parte de sus tradiciones.
En pleno corazón del Valle del Genal, cada año la pequeña localidad de Pujerra rinde homenaje a la castaña, uno de los productos más importantes de su economía y cultura local. La Fiesta de la Castaña, que coincide con el día de la patrona del municipio, la Virgen de Fátima, es una oportunidad para sumergirse en la tradición de asar castañas al fuego, pudiendo degustar más de 50 platos elaborados con ellas, acompañados de anís o aguardiente, al ritmo de la música y los bailes que amenizan la celebración.
Además, siempre se puede aprovechar para visitar las exposiciones de aparejos, ropas y utensilios tradicionales utilizados en la recogida de las castañas. Se suele celebrar a principios de noviembre y es considerada Fiesta de Singularidad Turística Provincial desde 2004.
Soria es tierra de setas, eso está claro, y en la pequeña localidad de Navaleno, a menos de 50 km de la capital, las Jornadas Micológicas son un evento esperado y ansiado tanto por aficionados como por expertos en la recolección de hongos. Cada año, en pleno apogeo otoñal, estas jornadas ofrecen talleres, conciertos, rutas por los pinares y diferentes degustaciones, con certámenes de tapas incluidos.
Durante las jornadas, que llegan a durar dos semanas entre finales de octubre y principios de noviembre, los visitantes pueden aprender a identificar diferentes especies de setas y disfrutar de platos cocinados con productos frescos del bosque, desde los tradicionales níscalos hasta los codiciados boletus.
En la localidad guipuzcoana de Tolosa, la alubia es mucho más que un simple ingrediente: es una joya gastronómica que cuenta con su propia celebración. Cada noviembre, la Feria de la Alubia, o Babarrun Festa, reúne a productores y amantes de esta legumbre para degustar y rendir homenaje a la famosa alubia de Tolosa, que destaca por su característico color oscuro y textura mantecosa.
En la feria se nombra el grano de alubia de mejor calidad en el Concurso de Productores, se realiza un concurso gastronómico a la mejor elaboración y se celebra una gran alubiada popular. Toda una fiesta gastronómica en la que no falta ni la música folclórica por las calles ni los trajes regionales. Así que si te quieres hacer todo un experto en alubias de Tolosa y descubrir el porqué de su fama, no vas a tener mejor oportunidad que esta.
El Magosto es una tradición profundamente arraigada en el noroeste de España y en la comarca leonesa de El Bierzo se vive con especial intensidad. Se trata de una fiesta ancestral que marca el inicio del otoño, relacionada incluso con antiguos ritos de agradecimiento a la naturaleza por los frutos de la tierra, y está íntimamente ligada a la recolección de la castaña.
Grupos de amigos y familias se reúnen en torno a hogueras para asar castañas, beber vino joven y disfrutar de productos locales como los bollos preñaos, los embutidos y los quesos. El Magosto berciano es uno de los más emblemáticos de Castilla y León y se celebra en infinidad de pueblos, desde Cacabelos hasta Carucedo, pasando por Villadepalos, Ponferrada o San Esteban de Valdueza, entre muchos otros municipios.
En tierras de La Mancha, octubre es tiempo de cosecha de una de las especias más valiosas del mundo: el azafrán. En la localidad de Consuegra, esta recolección se celebra el último fin de semana de octubre con la Feria del Azafrán, también conocida como Rosa del Azafrán. Un evento que tiene como principal objetivo dar a conocer y promocionar la esencia cultural manchega a través de la gastronomía, la artesanía, la historia y las tradiciones populares.
En esta fiesta, que se celebra desde 1963 y está declarada de Interés Turístico Regional, los visitantes pueden participar en demostraciones de la monda del azafrán, visitas guiadas tematizadas, asistir a concursos de cocina y degustar platos tradicionales donde la especia es la principal protagonista. La feria incluye también representaciones teatrales y numerosas actividades populares, por lo que Consuegra se convierte en un buen destino para conocer La Mancha más auténtica.
El Samaín es una de las festividades más antiguas de Galicia, con raíces que se remontan a los antiguos celtas. La palabra Samaín proviene del vocablo celta Samhain, que en etimología gaélica significa ‘fin del verano’, o más bien, el momento que marcaba el final de la cosecha y el comienzo del invierno. Una celebración pagana que, en otros sitios, se puede entender como Halloween. Se celebra, claro, la noche del 31 de octubre al 1 de noviembre.
En el municipio de Cedeira se vive con especial intensidad, y es que se dice que este pueblo coruñés recuperó el Samaín para volver a hacerlo popular en Galicia. Aquí se celebra con una mezcla de actividades tradicionales y contemporáneas, con calles decoradas con calabazas talladas y velas, casas del terror, queimadas, talleres de maquillaje y niños que se disfrazan. Además, se realizan desfiles y eventos para todos los públicos. Lo más interesante es que el Samaín no es simplemente una versión gallega de Halloween, sino una celebración con una historia propia, que simboliza el respeto por los ancestros y el tránsito entre estaciones.
En los Pirineos, en el bonito pueblo de La Seu d’Urgell, se celebra la Fira de Sant Ermengol, una de las ferias de queso más antiguas de Europa. Este evento, que tiene lugar cada mes de octubre, es el paraíso para los amantes del queso artesano. En él participan productores catalanes, aragoneses, vascos, navarros, franceses y también un queso invitado, y año tras año se ha consolidado como una plataforma de promoción, difusión y proyección exterior de los quesos elaborados en los Pirineos.
Aquí los visitantes pueden degustar y comprar una amplia variedad de quesos, pero también asistir a cursos y talleres que buscan popularizar y consolidar el conocimiento de este producto. La feria no solo es un escaparate de la riqueza gastronómica de la región, sino también un encuentro cultural con música, exposiciones y actividades que muestran el arraigo de esta tradición en la vida rural de los Pirineos. De hecho, también ofrece un apartado dedicado a la ganadería, donde encontramos una muestra de los bovinos y equinos más representativos del Alt Urgell.
La Fiesta del Orujo, que se celebra desde 1984, es una de las citas más importantes del otoño en Cantabria. Celebrada en el pintoresco pueblo medieval de Potes, en plenos Picos de Europa, esta festividad homenajea al orujo, ese destilado tradicional elaborado a partir de los hollejos de la uva que no necesita presentación. Durante el segundo fin de semana de noviembre, las calles de Potes se llenan de puestos donde se puede degustar este licor tan tradicional, así como disfrutar de actuaciones folclóricas, pasacalles y demostraciones de destilación en directo.
Declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional en 2012, la Fiesta del Orujo es toda una celebración del patrimonio cultural y gastronómico de la comarca de Liébana, por lo que tampoco faltan productos y recetas de la zona tan típicos como el cocido lebaniego, el borono con manzana o el queso Picón.