El Mar de las Calmas, con una extensión de más de 24.000 hectáreas, acoge una de las comunidades de zifios –cetáceos de aguas profundas– más importantes del mundo, además de especies subtropicales menos representadas en el resto del archipiélago canario
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Será el número 17 del país. Y el primero exclusivamente marino. El Consejo de Ministros ha aprobado este martes la propuesta de declaración de parque nacional de Mar de las Calmas, al sur de la isla de El Hierro, en Canarias. Esta iniciativa del Ministerio de Transición Ecológica reconoce la peculiaridad y el simbolismo de este espacio de más de 24.000 hectáreas por su riqueza natural y sus valores estéticos, culturales, educativos y científicos.
La zona es considerada de alto valor natural por los estudios científicos realizados en la última década, que destacan entre diferentes factores excepcionales su biodiversidad: se caracteriza por la presencia de especies de aguas profundas a escasa distancia del litoral, así como de especies tropicales y subtropicales menos representadas en el resto del archipiélago canario. De hecho, en sus aguas reside una de las comunidades de zifios, cetáceos de aguas profundas, más importantes del mundo.
El proyecto de este nuevo integrante de la red de parques nacionales viene de lejos, y ha llevado un intenso trabajo para conciliar la máxima protección con las actividades tradicionales de la zona, con un “diálogo continuo con ayuntamientos, vecinos, pescadores, cabildo...”, en palabras de la vicepresidenta Teresa Ribera. Y también es un proceso que llevará su tiempo: por lo menos un año. A partir de ahora se abre un trámite de consulta pública durante cuatro meses a partir de su publicación en el BOE. Luego debe elaborarse el proyecto de ley que se enviará a las Cortes para ser debatido y aprobado.
Esta propuesta ministerial se enmarca en el compromiso de que al menos el 30% del espacio marino cuente con alguna figura de protección en el año 2030.
La gestión de la pesca profesional mediante artes tradicionales artesanales y altamente selectivas realizada por la población herreña ha permitido conservar los recursos y la biodiversidad de la zona de forma extraordinaria, y la figura de parque nacional supondrá un reconocimiento a ese tipo de forma de vida y un apoyo a la investigación científica y el desarrollo socioeconómico de la isla.
El futuro parque nacional aún está en una fase inicial para su aprobación, que debe pasar por el parlamento para convertirse en una ley, a partir de la cual pasaría a estar gestionado por la Administración General del Estado, ya que se trata de aguas marinas bajo la soberanía nacional. Hasta la fecha, la Red de parques incluye 14 espacios terrestres, y dos marítimo-terrestres: el Archipiélago de Cabrera y las Islas Atlánticas de Galicia. Cuando la declaración de Mar de las Calmas culmine, Canarias sumará su quinto parque nacional a la lista que encabeza el del Teide, en Tenerife; Timanfaya, en Lanzarote; Garajonay, en La Gomera; y la Caldera de Taburiente, en La Palma.
