En su exitosa carrera en el fútbol, Xabi Alonso está empezando una nueva etapa como entrenador del Bayer Leverkusen, donde ha logrado llevar al equipo a la cima de la Bundesliga. El exfutbolista español, reconocido por su habilidad táctica en el campo, está demostrando ser igual de talentoso desde el banquillo. No obstante, el hombre que ha logrado éxito en el fútbol tanto como jugador como ahora como entrenador cuenta con el respaldo incondicional de su familia, en particular de sus padres, Periko Alonso e Isabel Olano.
El padre de Xabi Alonso, Miguel Ángel Alonso Oyarbide, también conocido como Periko Alonso, ha tenido una gran influencia en su carrera. Periko tuvo una gran carrera en el fútbol y su éxito le inspiró a Xabi desde muy joven.
Periko nació en Tolosa, Guipúzcoa, en el País Vasco, el 1 de febrero de 1953 y empezó su carrera en el fútbol profesional jugando como centrocampista. Curiosamente, su hijo Xabi jugaría en esa posición también. Jugó para la Real Sociedad, el Fútbol Club Barcelona y el Sabadell, entre otros equipos importantes de la liga española. En su tiempo en la Real Sociedad, desempeñó un papel importante en la obtención de dos campeonatos de Liga consecutivos en los años 1980-1981 y 1981-1982.
Periko Alonso tuvo un gran impacto en la carrera futbolística de Xabi. No solo le inculcó el amor por el deporte, sino que también le enseñó los principios del juego y la importancia de ser un jugador inteligente, una característica clave en la carrera de Xabi Alonso. A pesar de que Periko tenía un estilo de juego más físico, Xabi adquirió una habilidad táctica excepcional que le permitió destacar como centrocampista en la Real Sociedad y en equipos de renombre mundial como Liverpool, Real Madrid y Bayern Múnich.
La relación entre el padre y su hijo siempre ha sido de admiración y respeto mutuos. En varias entrevistas, Xabi ha expresado su agradecimiento por haber crecido en un entorno donde el fútbol se vivía con intensidad, pero también con los pies en la tierra, gracias a los consejos de Periko, quien le enseñó a mantener la humildad, incluso en los momentos de mayor éxito.
Isabel Olano, la madre de Xabi Alonso, ha tenido un papel importante en su vida, a pesar de que se ha mantenido alejada de la atención mediática que normalmente rodea a las familias de las estrellas del deporte. Isabel ha desempeñado un papel importante en la crianza y formación de Xabi y sus hermanos, a pesar de su discreción pública.
Isabel y Periko eran una familia unida y criaron a sus tres hijos en un entorno que valoraba la educación, los valores familiares y el deporte. Xabi ha experimentado un gran impacto de este sentido de pertenencia y orgullo cultural debido a las raíces vascas de la familia Alonso-Olano.
Isabel ha sido siempre descrita como una madre cercana y protectora, que ha seguido con gran interés la carrera de su hijo, pero sin buscar protagonismo. Ella enseñó a Xabi y sus hermanos la importancia de la disciplina y cómo equilibrar el éxito profesional y la vida personal. Cuando Xabi optó por emigrar al extranjero, primero a Liverpool y luego a otras importantes ciudades europeas como Madrid y Múnich, su apoyo incondicional fue crucial. Isabel siempre ha estado presente y brindando apoyo emocional en los momentos más importantes de la vida de su hijo a pesar de las distancias.
Aparte de Xabi, Isabel y Periko también tienen a Mikel y Jon. Mikel Alonso adoptó el estilo de su padre y hermano en el fútbol, aunque su carrera no fue tan exitosa como la de Xabi Alonso. Jon Alonso ha evitado el deporte profesional y ha tomado una dirección diferente.
La familia de Xabi Alonso es un ejemplo evidente de cómo el fútbol puede convertirse en una costumbre que se transmite de generación en generación. Crecer en un entorno donde el fútbol era tan importante, pero también en un hogar donde se valoraba el equilibrio entre la vida familiar y profesional, fue crucial para el desarrollo de Xabi como persona y como futbolista.
Xabi ha mencionado en varias ocasiones la importancia de sus padres en su vida, destacando el apoyo que tanto Periko como Isabel siempre le brindaron. Xabi ha sabido mantener una visión equilibrada del fútbol, en gran parte gracias a las lecciones de sus padres sobre humildad y trabajo duro.