A principios de mayo de este año, Confidencial Digital publicó que hasta después de las elecciones catalanas el Gobierno no tenía previsto anunciar ninguna medida relacionada con los medios de comunicación y la denominada como máquina del fango.
Y así ha sido, será el 17 de julio cuándo el presidente Pedro Sánchez comparezca en el Congreso de los Diputados para presentar su plan de regeneración democrática. Este día detallará una batería de medidas destinadas a atajar el problema.
Se conoce poco sobre este plan cuando queda una semana para que de presente en la Cámara Baja. Únicamente se sabe, por una entrevista que dio el líder del ejecutivo en la Cadena Ser, que presentará una reforma de la ley de publicidad institucional, así como una modificación de los derechos al honor y la rectificación
Moncloa ha apuntado a dos frentes: poner coto a la publicidad institucional, para evitar que los gobiernos municipales, autonómicos y centrales rieguen con dinero público a medios afines; y mejorar la transparencia conociendo quién es el dueño y quiénes los financian.
Sin embargo, en Sumar temen que estas medidas, anunciadas a bombo y platillo, no avancen lo suficiente para regular y democratizar un sector que apenas está regulado, según afirman desde la formación que encabeza la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz. “Llegamos tarde”, es el diagnóstico que lanzan desde Sumar. Y sospechan que el PSOE no quiere atajar de lleno este tema, precisamente porque los dos partidos resultan beneficiados del sistema discrecional de publicidad institucional.
A la espera de conocer de que van a ir esas leyes, ECD ha podido saber a quien no están dirigidas estas medidas: la televisión. El Gobierno ha comunicado a las cadenas privadas que no hay previsión de rebajar la cantidad de publicidad institucional que se destina a las televisiones. Además, han ido un paso más allá y han asegurado a las corporaciones que no se plantean volver a colocar publicidad en TVE.