Este año en el Chupinazo de los Sanfermines, que tendrá lugar el sábado 5 de julio, no estará expuesta la ikurriña vasca. A pesar de las declaraciones del alcalde de Pamplona de EH Bildu, Joseba Asiron, que cuando recuperó la alcaldía habló de impulsar un cambio en la Ley de Símbolos de Navarra para convertir la ikurriña en un símbolo del pueblo navarro, no la colocará en ningún mástil en el balcón del Ayuntamiento.
Así lo confirman a ECD portavoces oficiales del ayuntamiento, que añaden “no hay ningún motivo” por el cual esto sea así, a pesar de que Asiron ya la colocó en su anterior mandato como alcalde de Pamplona: por ejemplo, en los años 2015 y 2017.
El único cambio presente en estos Sanfermines por parte del Ayuntamiento de Pamplona, es que la elección de quienes lanzan el Chupinazo fue por voto popular y de ahí salió el rupo de danza pamplonés Duguna.
Cuando volvió a ser alcalde en diciembre de 2023, a través de una moción de censura contra Cristina Ibarrola (de Unión del Pueblo Navarro) apoyada por el Partido Socialista, Joseba Asiron, en varias entrevistas con los medios, habló del valor de la bandera de la comunidad vasca como símbolo de identidad para Pamplona.
Frente a este cariño por el símbolo vasco, comentó que una de sus misiones como alcalde iba a ser impulsar la modificación de la “Ley Foral 24/2003, de 4 de abril, de Símbolos de Navarra” para convertir la ikurriña en la bandera “oficial” de Navarra. También junto a estas declaraciones, a pocas horas de haber sido elegido, aseguró que desde EH Bildu estaban trabajando ya para conseguir este cambio en la legislación. Sin embargo, esta ley se mantiene con que los símbolos oficiales de esta comunidad foral son su bandera, el himno y el escudo.
La Ley Foral de Símbolos de Navarra expone en el Artículo 3 que “Los símbolos de Navarra gozan de la misma protección jurídica que las leyes estatales confieren a los símbolos del Estado”. Teniendo esto en cuenta, en el siguiente artículo se especifica que “Serán nulos de pleno Derecho los actos y las resoluciones de cualquier corporación o autoridad que contradigan lo dispuesto en esta Ley Foral. Será pública la acción para su impugnación y el Gobierno de Navarra podrá proceder a su impugnación ante la jurisdicción contencioso-administrativa, previo requerimiento, en las condiciones establecidas por la legislación de régimen local”.
En dos ocasiones, Asiron ignoró esta Ley de Símbolos para colocar la ikurriña en las celebraciones de San Fermín. La primera fue en 2015, recién llegado al poder como alcalde de la ciudad. Unos días antes adelantó a los medios que “de una forma u otra” pondría la bandera junto a las oficiales y así fue en el lanzamiento del Chupinazo. La segunda ocasión fue en 2017, cuando a quince minutos del estallido de la celebración colocó la ikurriña en un mástil vacío al lado de la bandera de España.
En 2015, Asiron justificó izar la ikurriña amparándose en que la ley foral de 2003, previamente mencionada, permitía que se exhibieran banderas de otras comunidades en caso de visitas oficiales, ya que es visto como algo de protocolo. Para esto el alcalde invitó a varias parlamentarias vascas que justificaran esa “visita oficial”, pero de igual manera fue condenado por “fraude de ley” y así fue considerado desde el Tribunal Superior de Justicia.
En 2017, la Delegación del Gobierno en Navarra impugnó la decisión del consistorio con el apoyo de UPN, partido opositor a EH Bildu, de esta forma el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Pamplona dio la razón al recurso presentado por ambas partes. El Ayuntamiento tuvo que pagar los costes del proceso, que llegaron a ser hasta 8.000 euros, lo que hizo que en 2018 el mástil antes utilizado para la bandera vasca, quedara vacío.
