El hundimiento del yate de lujo Bayesian frente a la costa de Sicilia, en el sur de Italia, ha dejado por el momento un muerto y seis desaparecidos, entre los que se encuentran un multimillonario británico y un alto ejecutivo del banco Morgan Stanley.
La nave de 56 metros de eslora y con bandera británica transportaba a 22 personas (12 pasajeros y 10 tripulantes) cuando fue impactada por una fuerte tormenta en la madrugada del lunes.
Quince personas fueron rescatadas y se recuperó un cuerpo que la guardia costera de Palermo confirmó que era el cocinero del yate, Recaldo Thomas.
Entre los desaparecidos se encuentran el magnate tecnológico británico Mike Lynch y su hija de 18 años Hannah; el presidente de Morgan Stanley International, Jonathan Bloomer, y su esposa Judy Bloomer; Chris Morvillo, abogado estadounidense de Lynch, y su esposa Neda Morvillo.
Una repentina y poderosa tormenta golpeó en la madrugada del lunes al Bayesian, que estaba anclado a las afueras de Porticello, un pequeño pueblo pesquero al este de Palermo, según testigos y la guardia costera italiana.
Testigos declararon a la agencia de noticias italiana Ansa que el mástil de aluminio de 72 metros de la embarcación se partió por la mitad, lo que desequilibró el barco y provocó su hundimiento.
Los buzos del equipo de búsqueda y rescate afirmaron que el yate estaba «prácticamente intacto» en el fondo del mar, lo que plantea dudas sobre si el mástil estaba roto.
Karsten Borner, capitán de un barco cercano, afirmó que tras la tormenta, su tripulación se dio cuenta de que el yate que estaba detrás del suyo había desaparecido.
Tras ver una bengala roja lanzada por los supervivientes, Borner y su tripulación hallaron un bote salvavidas a la deriva y rescataron a algunos de los sobrevivientes, incluidos tres que resultaron gravemente heridos.
Una de las sobrevivientes, la turista británica Charlotte Golunski, contó al periódico italiano La Repubblica cómo sostuvo a su hija de un año, Sofía, para evitar que se ahogara.
Aseguró que las dos y su pareja, James, sobrevivieron porque estaban en la cubierta cuando el yate se hundió.
Se despertaron por los «truenos, relámpagos y olas que hacían tambalearse a nuestro barco» y sintió lo que describió como «el fin del mundo» antes de ser arrojados al agua.
«Durante dos segundos perdí a mi hija en el mar, luego rápidamente la abracé en medio de la furia de las olas», recordó. Y agregó: «La mantuve a flote con todas mis fuerzas, con los brazos estirados hacia arriba para evitar que se ahogara”.
La guardia costera de Palermo indicó este martes que la operación de búsqueda y rescate de los seis desaparecidos continúa «sin descanso».
La búsqueda comenzó el lunes y buzos especializados han estado trabajando en el lugar desde la madrugada del martes.
Un buzo explicó a los medios italianos que el yate estaba «prácticamente intacto» y posicionado de costado a unos 50 metros bajo la superficie.
Su casco está obstruido con muebles y varios objetos, según el servicio de bomberos y rescate italiano.
Los buzos buscan formas de acceder a los camarotes del Bayesian, pero cuentan solo con 10 minutos en cada inmersión antes de tener que regresar a la superficie, informó la agencia de noticias italiana Ansa.
También se está considerando acceder al interior por una ventana de vidrio de 1 cm de espesor.
Francesco Venuto, portavoz de la agencia de protección civil de Sicilia, declaró a la BBC el lunes que los equipos de rescate creen que los cuerpos de los desaparecidos están atrapados en el barco.
El lunes llegó desde Roma un equipo de buceo especializado en búsqueda y rescate en cavidades con la intención de «lograr resultados» lo antes posible, según el director general de la agencia de protección civil de Sicilia, Salvatore Cocina.
Por su parte, la División de Investigación de Accidentes Marítimos de Reino Unido envió un equipo de cuatro investigadores para realizar una evaluación preliminar del hundimiento.
Cuando se produjo el suceso había 12 pasajeros y 10 tripulantes en el barco.
El único cadáver recuperado es el de Recaldo Thomas, chef con doble nacionalidad de Canadá y Antigua que trabajaba en el Bayesian.
Entre los seis desaparecidos se encuentra Jonathan Bloomer, presidente del banco Morgan Stanley International y de la compañía de seguros Hiscox, y su hija Hannah de 18 años.
Este ejecutivo británico de 70 años estudió en el Imperial College de Londres y anteriormente había formado parte de varios consejos de administración de empresas.
También buscan al empresario tecnológico Mike Lynch, de 59 años, conocido en su ámbito como el «Bill Gates británico».
Lynch fundó el gigante del software Autonomy en 1996 y recibió la Orden del Imperio Británico por sus servicios a la empresa en 2006.
En junio fue absuelto de cargos de fraude en relación con la venta por US$11.000 millones de su empresa a la estadounidense Hewlett Packard.
La esposa de Lynch, Angela Bacares, se encuentra entre las 15 personas rescatadas, de las que ocho reciben tratamiento en el hospital, según informó la guardia costera italiana.
El diario Il Giornale di Sicilia informó que en el barco viajaban en su mayoría pasajeros británicos, aunque también había personas de Nueva Zelanda, Sri Lanka, Irlanda y con nacionalidad francesa.
La entrada La agónica operación de rescate tras el naufragio de un yate de lujo en Italia en el que desaparecieron el presidente de Morgan Stanley International y otras 5 personas se publicó primero en EL NACIONAL.