Los Tiburones de La Guaira amanecieron este viernes igualados en la quinta posición de la tabla clasificatoria, empatados por los Navegantes del Magallanes y los Tigres de Aragua, y por fin en la zona de playoffs, luego de un deambular de dos semanas por el sótano de la LVBP.
El regreso del manager Oswaldo Guillén coincidió con este repunte de los escualos, que entre miércoles y jueves barrieron en Puerto La Cruz a los Cardenales de Lara, uno de los líderes del campeonato, y llegaron a cuatro victorias consecutivas.
La tropa litoralense llegó al encuentro de este viernes con cinco triunfos en seis presentaciones, desde que Guillén volvió de trabajar en la Serie Mundial como comentarista de la cadena ESPN Deportes.
Sin él, bajo las órdenes de los coaches Luis Alberto Rodríguez y Carlos García, tuvieron foja de 0-6 y cayeron al último lugar.
La barrida en el estadio Antonio Herrera Gutiérrez ocurrió a pesar de percances en la autopista, que obligaron a los salados a invertir casi ocho horas para hacer el recorrido entre Caracas y la Ciudad de los Crepúsculos.
“Hoy no bateamos”, dijo Guillén entre risas, recordando lo que los peloteros le dijeron al llegar, por fin, al parque cardenalero. “Y yo les respondí: ¿hoy? Si tienen un mes que no batean. No le dan un palo a nadie”.
La festiva salida del timonel coincidió con la mayor explosión ofensiva de los suyos en la 2018-2019, con un ataque de 19 hits y 11 carreras.
“Así es el beisbol”, sentenció Guillén.
Los Tiburones aprovecharon el mal momento de los pájaros rojos, pero sus abridores también cumplieron. Ambos (Jonathan Albaladejo y David Kubiak) llegaron al menos al sexto inning y cada uno aisló apenas una carrera.
La escuadra con peor average colectivo le ha dado un vuelco a esa situación. Desde el arribo de Guillén, precisó el periodista Rayner Rico, presentan .312 de average global con el madero.
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Ignacio Serrano
