El receptor venezolano
Salvador Pérez está a sólo tres jonrones de completar una curiosidad notable entre los grandeligas venezolanos y de imponer un nuevo tope personal, luego de llegar a 25 cuadrangulares en la jornada del jueves.
Es la segunda vez que el nativo de Valencia suma tantos vuelacercas en una temporada, mientras persigue su propia marca de 27, que consiguió en 2017 con los mismos Reales de Kansas City, una cifra que también le ayudó a poner un récord para receptores criollos en un año.
De los 27 de 2017, largó 24 cuando actuó como catcher, lo que representa un contraste respecto a 2018. De los 25 que suma ahora, únicamente 17 han sido con los aperos puestos, además de tener uno como inicialista y siete como designado.
Si todos sus bambinazos fueran en su posición natural Pérez sería el número uno entre los caretas de las Grandes Ligas, un privilegio que corresponde a Yasmani Grandal, de los Dodgers de Los Ángeles, con 23, y que en la Liga Americana tiene Mike Zunino, con 17.
El carabobeño necesita llegar a 28 tablazos de vuelta completa, no importa donde juegue, para así poder alargar esa curiosidad única entre criollo que hace de su carrera un recorrido asombroso: en cada una de sus campañas arriba ha dado más vuelacercas respecto a la anterior (3, 11, 13, 17, 21, 22 y 27, antes de esta oportunidad).
Pérez, que llegó a 70 empujadas y también persigue su marca personal de 80, batea para .235/.274/.446, con .720 de OPS.