En 2014, cuando Rajoy presidía el Gobierno de España, se aprobó en el Congreso de los Diputados una proposición no de ley casi por unanimidad, en la que se instaba al Gobierno a reconocer a Palestina como Estado. Después de unas largas negociaciones entre el PP y el PSOE el texto de la proposición reclamaba que se actuara de forma coordinada con la Unión Europea y la comunidad internacional.