En la naturaleza también existen procesos químicos, pero son mucho más seguros y beneficiosos para nuestra piel, por eso es crucial que los consumidores aprendan a leer las etiquetas de los productos que utilizan, por ejemplo, ingredientes como parabenos, ftalatos y el sulfato de sodio laureth son comunes en muchos productos de supermercado y pueden causar irritaciones, reacciones alérgicas e incluso otros problemas de salud más graves a largo plazo por el uso continuo.