Lo más importante del hallazgo científico es que la información estudiada en Loro Parque contribuirá con la conservación de esta especie de cetáceo en la naturaleza, ya que el conocimiento que se obtenga de cómo los estrógenos afectan y perturban los ciclos regulares en las orcas podría ayudar a entender cómo la contaminación química está afectando a la reproducción de las poblaciones salvajes, no solo de orcas, sino también de delfines y, en el futuro, de otras especies de mamíferos marinos.