El sindicato Acaip-UGT denuncia que "el deterioro de la sanidad penitenciaria que empieza a tener consecuencias en las prisiones dependientes de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias". Según los últimos datos recabados por la organización del Portal de Transparencia del Gobierno, el centro alicantino cuenta con dos de facultativos para atender a una población reclusa de más de 900 internos cuando, según la RPT (Relación de Puestos de Trabajo), deberían ser ocho. El panorama es similar en el ámbito nacional, pues el sindicato subraya que "el déficit supera el 67%, esto es, una ratio de 3,46 médicos por cada 1.000 internos, lo que contrasta con los 6,66 médicos por cada mil que tenían las prisiones españolas en 2014".
