En medio de la polémica por las declaraciones de Victoria Villarruel, quien manifestó su malestar por el salario que percibe, Patricia Bullrich se sumó a la ola de críticas entre los funcionarios del Gobierno.
La ministra de Seguridad no hizo oídos sordos y aseguró en diálogo con Radio Mitre que "Villarruel, como vicepresidenta, tiene que ir al Gabinete y llevar adelante las políticas del Gobierno".
En ese sentido, la excandidata a presidente lamentó, dado que es un recurso importante, que "(Javier) Milei haya perdido la posibilidad de tener una vicepresidenta que esté ordenada y que se discipline en decisiones estratégicas de Gobierno".
Sin ir más lejos, Bullrich consideró que "esto es una pelea política", por lo que volvió a remarcar -como gran parte de los funcionarios del Ejecutivo- la importancia de dar el ejemplo. "El que no se adapta, se va", afirmó.
La ola de críticas inició cuando Villarruel anunció que prorrogará el congelamiento de dietas en la Cámara Alta. Aunque, en ese ínterin, la vicepresidenta se quejó por su remuneración. "Me pagan dos chirolas", dijo.
"Si la vicepresidenta dice ‘voy a congelar los sueldos a los Senadores' y a los 10 minutos dice ‘gano chirolas', no lo está haciendo por convicción", señaló Bullrich.
En esa misma línea, la funcionaria aseguró: "Todos vivimos con el sueldo del Estado y somos los primeros que tenemos que dar el ejemplo, compartiendo el fondo de la decisión del Gobierno, que es la austeridad total de sus empleados como ejemplo total".
Justamente, en medio de una fuerte interna con el presidente, la expresidenta del PRO fue consultada acerca de si Villarruel debería renunciar a su cargo, tal como lo hizo Carlos "Chacho" Álvarez durante la presidencia de Fernando de la Rúa. "Se trata de una situación distinta. Ella ha sido electa por los argentinos", descartó.