El papa Francisco anunció los nuevos ordenamientos de cardenales esta semana para la curia ampliada de la Iglesia católica. Sin embargo, la polémica se encendió cuando comenzó a nombrar a la nómina electa y pronunció a Nuncio Acerbi como primer candidato.
Después de la oración mariana del Ángelus, el sumo pontífice leyó la lista de los neopurpurados que creará en la solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María el próximo Consistorio del 8 de diciembre. Las alarmas se prendieron con el primer nombre que eligió el excardenal Jorge Bergoglio para iniciar la nómina.
El líder de la Iglesia católica eligió como primer electo a su "compañero de habitación", el arzobispo Angelo Acerbi, quien cumplió 99 años en 2024 y será el referente más longevo del Colegio Cardenalicio tras su designación.
La decisión de nombrarlo primero sugirió de inmediato como un gesto de atención y estima por parte del sumo pontífice hacia el nuncio y sus casi setenta años de servicio a la santa sede.
Bergoglio ya había querido rendir homenaje a Acerbi el pasado 27 de junio al celebrar juntos la misa en la capilla de la Casa Santa Marta donde vive el nuevo mandatario como conmemoración del medio siglo desde su ordenamiento.
El papa Francisco nombró cardenal a su "compañero de habitación".
"Más de cincuenta años entre las Nunciaturas de medio mundo desde el Pacífico hasta el centro de Europa lleva el nuevo referente. En el medio, fue secuestrado por guerrilleros en Colombia con un servicio siempre fiel al Vaticano y a la Iglesia con el cargo también de prelado de la Soberana Orden Militar de Malta", indicaron las fuentes oficiales.
Los últimos años "de descanso" fueron como decano de los Nuncios apostólicos en la Domus Santa Marta y como "coinquilino" del papa Francisco. A sus 99 años, el arzobispo Angelo Acerbi será nombrado cardenal y se consagrará como el más anciano de la curia desde el próximo 8 de diciembre.
Acerbi nació un 23 de septiembre de 1925 en Sesta Godano, La Spezia, Italia y el 27 de marzo de 1948 fue ordenado sacerdote. Desde 1956 trabajó para el Vaticano en las sedes pontificias de Colombia, Brasil, Francia, Japón y Portugal, así como en el Consejo para los Asuntos Públicos de la Iglesia de la Secretaría de Estado.
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En 1974, el papa Pablo VI lo nombró pro-nuncio apostólico en Nueva Zelanda y delegado apostólico en el Océano Pacífico más el título personal de arzobispo. Luego, el papa Montini le dio la ordenación episcopal en la Basílica de San Pedro.
