Los consejos adecuados pueden marcar la diferencia a la hora de mejorar la circulación en las piernas y aliviar la pesadez que muchas personas experimentan.
La vida moderna, que a menudo implica largos períodos de inactividad, puede afectar negativamente el flujo sanguíneo en las extremidades inferiores. Sin embargo, existen métodos que contribuyen a optimizar esta función, favoreciendo el bienestar general.
Estos consejos son especialmente útiles para quienes pasan mucho tiempo de pie o sentados, ya que una buena circulación es fundamental para mantener la salud y el bienestar general.
A continuación, se presentan algunas recomendaciones efectivas que pueden ayudar a optimizar el flujo sanguíneo y reducir la sensación de fatiga en las extremidades inferiores.
Masajear las piernas y elevarlas durante el descanso favorece el drenaje linfático y alivia la fatiga acumulada. (Fuente: Freepik)
Levantar y ejercitar las piernas
Elevar y mover las piernas es fundamental para mejorar la circulación. Esta práctica estimula el flujo sanguíneo, resultando eficaz tanto en la prevención como en el tratamiento de problemas circulatorios, incluidas las varices, tal como señala la revista Mejor con Salud.
Para llevar a cabo este ejercicio, la persona debe:
Las flexiones de rodillas son un complemento que potencia los beneficios de este ejercicio. Además, se sugiere realizar movimientos circulares con los tobillos mientras se mantiene la posición de las piernas estiradas.
Caminar de puntillas
Realizar la actividad de caminar sobre las puntas de los pies ayuda a activar la contracción de los músculos gemelos, lo que a su vez comprime las venas, facilitando el retorno venoso.
Este proceso es conocido como "bomba muscular" y su correcta activación es esencial para la circulación en las piernas.
Lo recomendado es levantarse y hacer el movimiento de pararse de puntas de pie diez veces sin desplazarse.
Este ejercicio puede complementarse alternando con la elevación de los talones, contrayendo así los músculos opuestos y beneficiando la circulación.
La actividad física regular, como caminar o realizar ejercicios específicos, mejora la circulación en las piernas y reduce la sensación de pesadez. (Fuente: Freepik)
Pedalear desde el suelo
Imitar el movimiento de pedaleo, mientras se está acostado en el suelo, es una excelente estrategia para promover un adecuado retorno venoso en las piernas.
Al elevar y mover las piernas simultáneamente, se facilita que la sangre regrese al corazón, mejorando la circulación en general.
Masajearse las piernas
Un masaje en las piernas al final de una jornada laboral es esencial para aliviar la sensación de pesadez. La técnica consiste en iniciar el masaje desde la parte superior de las piernas hacia abajo.
Se recomienda envolverlas con las manos, aplicar presión en las áreas donde se sienta mayor tensión, y finalizar el tratamiento mojando los pies y los gemelos en agua fría.
Para activar la circulación sanguínea en las piernas, la infusión de la planta del rusco, conocida científicamente como Ruscus aculeatus, se presenta como una opción natural muy efectiva.
Este recurso herbal mejora la circulación venosa, y también cuenta con propiedades antiinflamatorias que ayudan a prevenir la aparición de varices, promoviendo una sensación general de bienestar en las extremidades inferiores.
Las infusiones de plantas medicinales, como el rusco, pueden ayudar a activar la circulación sanguínea y prevenir problemas venosos. (Fuente: Freepik)
La planta de rusco es rica en compuestos como saponinas, resinas, flavonoides, potasio y aceites esenciales, los cuales se concentran principalmente en sus raíces y rizomas.
Estos componentes favorecen el drenaje linfático, facilitando la eliminación de líquidos y toxinas que pueden resultar perjudiciales para el organismo.
