La famosa psíquica Vangelia Pandeva Dimitrova, más conocida como Baba Vanga o la Nostradamus de los Balcanes, logró reconocimiento por pronosticar el atentado a las Torres Gemelas.
La popular clarividente falleció en 1996, pero sus relatos se volvieron populares luego de su muerte.
Según solía decir, unas "voces que venían de otra dimensión", le susurraban lo qué sucedería en el mundo. Así, 26 años después de su muerte, algunas premoniciones todavía tienen vigencia.
Baba Vanga había señalado que "los hermanos estadounidenses caerán tras ser atacados por pájaros de acero. Los lobos estarán aullando en los arbustos, y correrá sangre inocente". Según analizaron, esta premonición se relaciona con el atentado del 11 de septiembre de 2001, las famosas torres de Nueva York fueron derribadas por el avión terrorista.
Su última profecía incluye la explosión de una central nuclear y sostiene que "la humanidad debe estar lista para la explosión que tendría lugar en un gran país que realizará experimentos con este tipo de armas químicas", según los especialistas que analizan sus claves.
La Nostradamus de los Balcanes indicó que no solo habrá una gran explosión, sino que también se usarán armas biológicas que causarán un grave daño al planeta. Además, en un contexto de alta tensión entre Rusia y Ucrania, la clarividencia tiene más sentido.
Baba Vanga predijo una crisis armamentística global.
Según la predicción, la crisis bélica comenzaría con una explosión en una central nuclear a raíz del desarrollo de armamento atómico y la manipulación de elementos químicos de destrucción.
Luego, otra implosión tendría lugar en los siguientes meses. Debido al contexto actual del mundo y la globalización habría un terrible daño a la humanidad, según los intérpretes.
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Las otras profecías de Baba Vanga que coincidieron con hechos de realidad son las siguientes, según los analistas:
La Nostradamus de los Balcanes perdió la visión luego de quedar expuesta a los escombros de un tornado. En ese momento, el mito relata que adquirió sus poderes que la llevaron a pronosticas otros fenómenos extraños como una invasión extraterrestre y una tormenta solar que bloquearía las telecomunicaciones.
