A poco más de tres semanas para que termine la "Etapa 1" del Régimen de Regularización de Activos, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) se encuentra fiscalizando tanto a los contribuyentes que ingresaron como a los que aún no lo hicieron. Las recientes notificaciones por criptoactivos y los cambios en la letra chica que se preparan.
La iniciativa cumple un rol clave para el programa del ministro Luis Caputo: en el discurso oficialista se destaca que el objetivo de la misma no es sumar ingresos (con un impuesto que se paga en la mayoría de los casos en dólares estadounidenses en medio de la caída de reservas del Banco Central de la República Argentina, BCRA), sino la reactivación económica.
Para ello, en la Ley 27.743, se fijaron los incentivos para fomentar el ingreso durante los primeros días de la iniciativa con la alícuota más baja (del 5%) para montos superiores a u$s 100 mil y la única en la que se puede exteriorizar dinero en efectivo.
Sin cifras oficiales sobre cuántas adhesiones sumó la iniciativa, salvo las 1.500 Cuentas Especiales de Regularización de Activos (CERA) del Banco Nación Argentina (BNA), en el organismo que lidera Florencia Misrahi confían que la mayor cantidad se generará en los últimos días.
Pero a 25 días para el corte de la primera etapa, según pudo saber El Cronista, en exclusiva, la AFIP habría enviado notificaciones a los domicilios fiscales electrónicos por tenencia u operaciones con criptomonedas a los fines de que regularicen su situación. A su vez, de que estarían trabajando en una Resolución General con cambios en la letra chica respecto a estos activos que se dará a conocer en los próximos días.
Los activos que están en el colchón digital resultan de interés para el Gobierno por el volumen que suma. Según el relevamiento que realizó la billetera cripto SaldoAr, en enero de pasado, ascendían a más de u$s 100 mil millones en valores de "criptomonedas" que no estaban declaradas ante el fisco.
"Cada vez son más las consultoras que reportan cifras que confirman el dato", sostuvo que el economista de la Fundación Blockchain Argentina, Roberto Rojas. Quien, a raíz de la identificación de 10 millones de cuentas de criptoactivos de argentinos por la Comisión Nacional de Valores (CNV), infirió que en promedio hay u$s 10 mil en cada una.
Sin embargo, la redacción de la Ley de Medidas Fiscales Paliativas y Relevantes plantea desincentivos para la exteriorización por los parámetros que se establecieron para la valuación: el de su adquisición o el que tenía al 31 de diciembre de 2023.
"Los criptoactivos podrían reducir su precio en gran medida desde su adquisición, por lo que declarar un valor mayor que el de mercado como base imponible significa cargarlos con un mayor impuesto efectivo, lo cual resulta arbitrario y, en definitiva, genera un fuerte desincentivo", destacaron en el comunicado de Bitcoin Argentina.
