Federico Furiase, director del Banco Central y miembro clave del equipo del ministro de Economía, Luis Caputo, difundió un informe oficial en el que se señala que la deuda del Tesoro en pesos cayó 10 puntos porcentuales del PBI.
Lo hizo a través de sus redes sociales, después de que la Secretaría de Finanzas informara que la deuda pública total medida en dólares aumentó casi u$s 10.000 millones en julio, a pesar de que el Gobierno registró un superávit fiscal primario.
En su cuenta de X, Furiase destacó que hubo una "reducción del overhang monetario" en 10% del PBI, con "solvencia fiscal intertemporal", siendo el overhang monetario los pasivos remunerados del Banco Central heredados. En el gráfico compartido se observa que la deuda consolidada neta (que incluye la deuda del Tesoro en pesos y los pasivos remunerados del BCRA en pesos) disminuyó del 42,7% en diciembre de 2023 al 32,3% del PBI en julio de 2024.
Además, la deuda pública del Tesoro en pesos, neta de los depósitos en pesos del Tesoro, prácticamente se mantuvo sin cambios: era del 27,9% del PBI en diciembre de 2023, y en julio pasado se situaba en 27,4%. Según detalló Furiase, esto se debió al superávit fiscal primario acumulado del 1,4% del PBI y a un "endeudamiento neto del Tesoro a tasas sostenibles". De cara al futuro, el economista proyectó que el stock de deuda neta del Tesoro con el sector privado bajará a 32,3% del PBI, lo que representará un descenso de 0,6 puntos porcentuales en el año.
Otros integrantes del equipo económico respaldaron el informe de Furiase. Felipe Núñez, director del banco BICE, escribió en X: "Esto es clave: a pesar de que el Tesoro absorbió los pasivos remunerados, la deuda disminuyó en términos del PBI. Y esto es así gracias a la innegociable ancla fiscal, que sostiene el Presidente personalmente". Además, indicó que hay que restar los pesos que tiene el Tesoro en caja, que ascienden a unos $16 billones.
La publicación también generó dudas. El analista financiero Christian Buteler comentó: "Entiendo que este gráfico omite el overhang monetario que fue trasladado a deuda en dólares con los Bopreales". Buteler se refiere a los casi u$s 10.000 millones que disminuyeron como deuda del Banco Central, pero que hoy son Bopreales en dólares y no están contabilizados como parte de la deuda total en pesos y dólares.
Por su parte, Javier García Cicco, profesor en Udesa, señaló que la reducción de la deuda consolidada en pesos puede darse por tres factores: para una misma tasa y madurez, licuación por inflación; con la misma madurez e IPC, menores tasas; o con la misma tasa e IPC, mayor madurez. Sin embargo, indicó que no se explica la contribución de cada uno.
Desde Portfolio Personal Inversiones (PPI) informaron a este diario que sus cifras son similares. Sobre la posible motivación detrás de la publicación, indicaron: "Desde nuestro punto de vista, no hay grandes problemas a la vista en la deuda en pesos. El Tesoro posee alrededor de $20 billones entre la cuenta del sector público no financiero en el BCRA y el BNA, lo que reduce los eventuales temores de refinanciamiento en los próximos meses".
La semana pasada, la Secretaría de Finanzas informó que la deuda bruta expresada en dólares alcanzó un máximo histórico de u$s 452.071 millones, un incremento de u$s 9.566 millones con respecto a julio y de u$s 82.000 millones en lo que va del año. Según Nicolás Gadano, economista jefe de Empiria, esto se debió a la apreciación cambiaria, a los intereses capitalizables y al llamado "saneamiento" del Banco Central.
En la misma línea, desde Econviews explicaron que, contablemente, lo que ocurrió en julio es que el Tesoro absorbió la deuda del BCRA por pases, equivalente a u$s 11.000 millones al tipo de cambio oficial. "Esa deuda no es nueva, simplemente estaba en otro libro del gobierno. Anteriormente ya había absorbido unos u$s 20.000 millones más que provinieron de pases y Leliqs a Lecaps", señalaron.
Sin embargo, explicaron que lo relevante es la deuda consolidada entre el BCRA y el Tesoro: "Desde el punto de vista jurídico son cosas distintas, pero desde la óptica de la solvencia son lo mismo", aclararon, aunque agregaron que se debería sumar al stock de deuda pública los Bopreal.
"En términos del PBI, estimamos que la deuda podría cerrar el año entre el 70% y 75%, incluyendo la deuda intra-sector público. No es un número alarmante, sobre todo si la economía crece en 2025 en un esquema ya sin cepo", concluyeron.