Una investigación científica de 35 años ha revelado sorprendentes resultados sobre la evolución de los seres vivos, mostrando nuevas perspectivas sobre cómo los organismos han cambiado a lo largo del tiempo.
La investigación liderada por Richard Lenski, que lleva más de tres décadas en marcha, arrojó resultados que desafían algunas ideas preestablecidas sobre la adaptación de las especies.
La investigación dirigida por el biólogo Richard Lenski, que comenzó en 1988, ha arrojado sorprendentes resultados sobre la evolución de los seres vivos. Lo que inicialmente se planeó como un estudio de pocos meses, se extendió por más de 35 años debido a los inesperados hallazgos.
El experimento comenzó con 12 poblaciones idénticas de la bacteria Escherichia coli, que vive en el intestino humano, y ya ha registrado más de 75 mil generaciones.
El estudio comenzó con 12 poblaciones idénticas de Escherichia coli para observar su evolución a lo largo del tiempo. (Foto: Unsplash)
Un descubrimiento clave ocurrió en la generación 31.500, cuando una de las colonias desarrolló la capacidad de alimentarse de citrato de sodio, algo que no había ocurrido en las otras 11 colonias, lo que resultó en la aparición de una nueva especie.
Este hecho singular muestra cómo la evolución puede ser predecible en ciertos aspectos, pero también plantea preguntas sobre el papel del azar en la aparición de nuevas características.
A lo largo de la investigación, las mutaciones han sido escasas, ocurriendo en solo una de cada mil bacterias, pero dado el gran número estudiado, esto equivale a aproximadamente un millón de mutaciones diarias.
Este experimento es comparable a 1.5 millones de años de evolución humana, proporcionando una visión única de cómo las mutaciones emergen y afectan la supervivencia de una especie.
En la generación 31.500, una de las colonias de Escherichia coli desarrolló la capacidad de utilizar citrato de sodio como fuente de alimento. (Foto: Shutterstock)
El objetivo principal de esta investigación es observar cómo se producen y desarrollan las mutaciones a lo largo de las generaciones de bacterias y evaluar en qué medida estas mutaciones representan una ventaja evolutiva para la especie.
Además, el experimento se enfoca en dos aspectos clave:
