El pelo se caracteriza por su gran variedad de texturas y espesores. El fino es delicado, con poca densidad capilar, mientras que el grueso es pesado y suele ser más resistente.
Sin embargo, un nuevo estudio de la Universidad de California publicado en la revista Matter demostró lo contrario y permitió derribar una creencia popular, ¿el pelo fino es más fuerte que el cabello grueso?
Durante mucho tiempo circuló la idea de que el cabello grueso era más resistente que el fino. Esta creencia popular afirma que, debido a su mayor diámetro, el primero es menos propenso a romperse o dañarse.
Sin embargo, un nuevo estudio demuestra que esta noción no es del todo cierta. La resistencia depende de varios factores más allá de su grosor, como su composición química, la salud del cuero cabelludo y los cuidados que recibe.
A partir de muestras de ocho tipos de mamíferos (entre ellos los humanos) se encontró que todos comparten una capa externa de proteínas comúnmente conocida como cutícula que envuelve una corteza interna formada por muchas fibras pequeñas. Esta estructura permite que el pelo sea más resistente a la deformación.
Los investigadores ataron mechones individuales de pelo a una máquina que ejercía fuerza sobre ellos hasta romperlos. Como resultado, se encontró que los pelos finos eran más resistentes a la tensión en comparación con los gruesos.
Sinc Wen Yang, nanoingeniera de la Universidad de California y autora principal del estudio, explicó que el secreto se encuentra en la ruptura de los cabellos.
Se puedo registrar que el pelo grueso tenía un corte limpio y claro. En el caso del fino, tiende a agrietarse y sufrir pequeñas grietas en zigzag como resultado de la tensión.
"Lo que sucede es que las grietas se reproducen y el pelo no se rompe del todo. Este tipo de rotura puede soportar una mayor tensión, por lo que es más resistente", sumó.
Estos resultados contribuyeron al diseño de mejores materiales sintéticos, aunque por el momento su fabricación se encuentra en proceso.