Las condiciones meteorológicas no están siendo las mejores, pero los tres Reyes Magos de Oriente se las han visto en mucho peores. Llueva o nieve, igual que en la noche del domingo se asegurarán de repartir todos sus presentes, Melchor, Gaspar y Baltasar quieren presentarse ante los niños y niñas que los esperan con ilusión por toda Galicia. Por eso, en algunos municipios optaron por adelantar un día las cabalgatas, previendo que la climatología del domingo podría ser menos clemente, mientras que en otros mantendrán para la víspera sus reales comitivas; algunos, aplicando según qué ajuste para garantizar la seguridad y el disfrute. Entre los concellos que el sábado acogieron cabalgatas estuvo el de la capital gallega, en donde se mantuvo el mismo recorrido. A las cinco y media de la tarde partió de la plaza de Nosa Señora da Mercé, en Conxo, una procesión que recorrió el centro urbano y el casco histórico, culminando en la plaza del Obradoiro –y que no siguió la estrella de Belén, sino «la de Compostela», muy apropiadamente–. Pese a que la lluvia fue una constante, acompañados de música y espectáculos, los tres Reyes Magos repartieron ilusión y caramelos a partes iguales entre los más pequeños. Santiago no fue el único: otros ayuntamientos que optaron por adelantar sus desfiles fueron A Cañiza, Nigrán, Oia, Paderne, Guitiriz –que hoy solo celebrará una recepción–, Cangas o Verín. Mientras tanto, otros concellos se adhieren –en principio– a su previsión inicial. Es el caso de Oleiros, Carballo o Betanzos. También ciudades como Ferrol, Pontevedra, Lugo –que solo suspenderá la procesión del domingo si se dan lluvias intensas– u Orense, que, igual que La Coruña, mantiene la fecha pero realizará ajustes en el recorrido en respuesta a la climatología adversa. Por un lado, la cabalgata orensana cambiará su lugar de salida –a las seis de la tarde– de la estación de tren al Pabellón dos Remedios, anunció el Consistorio en un comunicado. Y, en el mencionado caso coruñés, la real comitiva arrancará desde la ronda Camilo José Cela, en el Barrio de las Flores –a la misma hora que en Orense– y transitará las calles hasta alcanzar la Plaza de María Pita en un itinerario muy similar al de 2024. Los ajustes debido al mal tiempo, informó el Ayuntamiento, se limitarán a la sustitución en el recorrido de la calle Ramón y Cajal por la avenida de Fernández Latorre a su paso por Oza. Según avanzó el Concello, los visitantes podrán ver trece carrozas, seis trenes y dieciocho espectáculos de temática «invernal» que conjurarán «un mundo mágico y gélido», con «hadas, animales muñecos de luz y color, acróbatas, seres mágicos y demás personajes fantásticos». A mayores, los niños y niñas figurantes portarán vestimentas «inspiradas en el cielo y las estrellas», en celebración del cuarenta aniversario, en 2025, de la apertura de la Casa das Ciencias y su planetario. La ciudad olívica también tendrá el domingo su visita de los Reyes Magos de Oriente, pero en un formato menos convencional. Será un despliegue estático, emplazado en las instalaciones del Instituto Ferial (Ifevi), que podrá visitarse de once de la mañana a dos del mediodía y de cinco a ocho de la tarde. Allí permanecerán aparcadas las diez carrozas y serán los visitantes quienes, esta vez, deberán itinerar a su alrededor. Eso sí, también habrá animación a cargo de varios grupos que se moverán por la instalación. Y, para facilitarles la tarea de entregar regalos en los hogares de Vigo, a las siete, el regidor Abel Caballero hará entrega a Sus Majestades de la llave de la ciudad. El viernes, Caballero anunció que se dispondrían a mayores, desde la mañana, «tres autobuses oruga» –y otros dos más «en caso de haber demanda»– que partirán del centro y dejarán a los usuarios en la puerta. También Vitrasa refuerza la línea A, con cuatro frecuencias que circularán entre la calle Colón y el recinto ferial, en ambos sentidos. Las que sí podrán disfrutarse sin miramientos, a falta de un desfile, serán las recepciones reales, en las que los niños y niñas podrán tener su encuentro con los Reyes Magos al amparo de las inclemencias atmosféricas. Así se hará, entre otros municipios, en Lousame, Marín, Valga, Sanxenxo o Poio –en su caso, tras una ruta real previa–.
