Si se confirman los vínculos con Estado Islámico del terrorista suicida de Nueva Orleans, se verá fortalecida la tesis de quienes desde hace tiempo vienen anunciando que Daesh está de regreso, una década después del fiasco de su 'califato'. El movimiento yihadista creó en aquellos momentos un Estado fundamentalista -más radical que el de Irán o el de los talibanes- en territorio conquistado en Irak y Siria, y situó su capital en Raqa. Pese a disponer de su propio feudo, Daesh no disminuyó entonces su llamada a la yihad -la guerra santa global del islam contra el mundo no musulmán-, con el mismo tono apocalíptico de otros grupos terroristas como Al Qaida. Tras la caída del 'califato' y la casi...
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