La presidenta de la Comunidad de Madrid, la popular Isabel Díaz Ayuso, ha despedido esta noche el año recordando a las víctimas de la dana y agradeciendo los esfuerzos de los profesionales madrileños que se desplazaron hasta la zona cero de la catástrofe. «Estamos al lado de los que han perdido en Valencia a sus seres queridos, sus hogar, sus negocios y el trabajo de una vida», ha apuntado la líder regional en su tradicional mensaje de fin de año. No ha olvidado tampoco reivindicar que en la Comunidad de Madrid, territorio que gobierna desde el año 2019, son «los primeros» en cumplir la ley frente al «abuso», la «impunidad» y «el totalitarismo en todas sus formas». La mandataria autonómica, que ha elegido como escenario la unidad dedicada a la rehabilitación y atención a los enfermos de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) del Hospital Isabel Zendal de la capital, ha apelado al principio de su alocución «a la libertad y la vida» y ha apuntado que la del 31 de diciembre «es una noche para admirar y dar las gracias». Ayuso ha hecho además mención especial tanto a los más de 700 profesionales que acudieron en ayuda a los damnificados por la dana como a todo el personal sanitario madrileño, profesores y maestros, funcionarios, Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. También a Su Majestad el Rey y a la Corona, «a quien Madrid y España le debemos –ha dicho– desde el Prado hasta la Transición, el unirnos a todos los españoles, y que tengamos la mejor representación posible cuando más lo necesitamos». La presidenta regional ha apelado en su mensaje a la responsabilidad que ostenta Madrid al ser la capital del país. «Es nuestro orgullo y debe para con España entera ser la región más solvente. Debemos ser ejemplo de estabilidad, seguridad en las calles y seguridad jurídica», ha expresado. Todo ello al mismo tiempo que ha recordado las exigencias a las que se enfrenta la región, a la que «todos los ojos miran». Por ello, aunque sin hacer ninguna alusión concreta, Ayuso defiende que en la Comunidad de Madrid son «los primeros» en cumplir la ley, pero también «en pedir que se cumpla por España y el mundo, en no permitir la impunidad , ni callar ante el abuso y el totalitarismo en todas sus formas». La baronesa del PP cierra un año convulso marcado, entre otros asuntos, por el caso de su pareja, Alberto González Amador, imputado por presunto fraude fiscal y falsedad documental. Pero también por la investigación judicial abierta contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortíz, a quien el Tribunal Supremo imputó por supuesta revelación de secretos en relación a la difusión de información sobre el procedimiento de González Amador. Una causa por la que Ayuso ha exigido en múltiples ocasiones la dimisión del fiscal, que se aferra al cargo con el apoyo de Sánchez. Ahora, comienza el 2025 poniendo el acento en las amenazas a las que se enfrenta la sociedad madrileña , así como en los desafíos y retos que tiene por delante. «Tenemos que preservar nuestras competencias mientras seguimos siendo la región más solidaria; defender la unidad de España, nuestra Constitución y el Estado de derecho, la independencia del Poder Judicial, al dignidad del Parlamento y el decoro de la vida pública, la concordia entre españoles, el respeto al papel fundamental de la Corona, y de nuestras Fuerzas Armadas y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado». Ayuso felicita así el año no sin antes hacer mención al compromiso que mantienen ella y todo su equipo de Gobierno por «estar a la altura» de esta región. «Madrid, gusta en el mundo, sirve bien a España y defiende vivir con muchas ganas», concluyó orgullosa.
