Me vinieron a este mundo a orillas del mar. Quizás por eso, como la luna a las mareas, me haya atraído tanto el último libro de la escritora gordonesa (y cada vez más universal) Noemí Sabugal. O quizás porque su predecesor, 'Hijos del carbón' (también publicado por Alfaguara), significó un acontecimiento literario y universal que, como las ballenas hostigadas por arponeros tozudos, sigue dando coletazos de éxito. Leer a Noemí Sabugal crea siempre una especie de conflicto interior, de cruce de sensaciones que son difíciles de confluir, salvo en el desenlace, cuando la satisfacción crea un retrogusto gratificante en el paladar. Y es que uno no sabe (o no logra distinguir) si está leyendo a una periodista con una pluma...
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