En mitad del caos político que sume a Corea del Sur, con dos presidentes destituidos en dos semanas, un accidente de avión se ha cobrado la vida de al menos 62 de sus pasajeros. El incidente ha tenido lugar en el aeropuerto internacional de Muan, al suroeste del país, en la región de Jeolla del Sur. Este accidente, del que las autoridades aún no dan por cerrada la cifra de víctimas, lo ha captado una cámara y se ha emitido por la televisión surcoreana, concretamente la cadena Munhwa Broadcasting Corporation. Las imágenes muestran cómo un avión comercial -un Boeing 737-8AS de Jeju Air- cargado con 175 pasajeros y seis miembros de la tripulación desliza por la pista a gran velocidad sin el tren de aterrizaje desplegado, tras una maniobra de aterrizaje, según han informado las autoridades del país en testimonios recogidos por la agencia de noticias estatal Yonhap. Dejando tras de sí una estela de humo, la aeronave continúa sin control hasta salirse de la pista, donde choca frontalmente contra una valla y explota violentamente, partiendo su cola y envolviéndolo en llamas. Los equipos de bomberos han conseguido apagar el fuego tras 43 largos minutos, cuando han pasado al rescate prioritario de los atrapados en la zona posterior del avión. La hipótesis principal que se maneja apunta a la intervención fortuita de un ave, que podría haber causado un mal funcionamiento del tren de aterrizaje, según ha informado Yonhap.