El restaurante de 'First Dates' permanece abierto durante las vacaciones de Navidad. Fue la noche del lunes 23 de diciembre cuando recibió en sus instalaciones a Aleix (19), un joven de Girona que llegó con las ideas muy claras en lo que a su prototipo de chica se refería. «Más bajita que yo, si es más alta no me interesa», puntualizó. Y que fuese 'catalaneta'. Afirmó no ser muy radical en eso, le bastaba «que me hable catalán, le guste el catalán y que ame Cataluña como la amo yo». Sin embargo, ese punto le falló a Aleix tanto como para darle calabaz as. «Antes de nada, ¿de dónde eres?», preguntaba Laura Boado a Abril (18), la cita del estudiante de educación física. La ayudante de Carlos Sob era creyó que la cosa estaba al averiguar que la chica era de Barcelona. Pero nada que ver. Aleix , de primeras, no impresionó a Abril . «No he tenido ni buena ni mala impresión», comentaba ella. Y eso que lo había visto por Tik Tok. Él también se quedó frío con el encuentro. Empezar la velada hablando de deporte tampoco ayudó a que la chispa surgiera. Él no podría estar con una persona sedentaria, y ella en temas de ejercicio solo practica 'sofing'. Como mucho, «yo corro para coger el tren y ya está». Aunque el verdadero desencuentro ente ambos llegaría a continuación. Aleix estaba muy interesado en hablar del idioma. «¿Tú estás acostumbrada a hablar castellano?», quiso saber. «Yo hablo los dos idiomas, pero en mi día a día hablo castellano», le explicaba su cita, añadiendo que toda su familia vive fuera de Cataluña. Pero Abril ya se había dado cuenta de que «para él era muy importante que yo fuese catalana». «A mí el hecho de que fuese catalán me venía bien porque está cerca, pero no porque fuese catalán», replicó. «Podría ser catalaneta, pero no me habla catalán. Ni le he notado el acento», abordaba, por su parte, Aleix . Además, el joven se interesó por las ideas políticas de su cita, confesando antes los propios. «Yo soy de Cataluña, Cataluña. Soy de izquierdas. Quiero la independencia de Cataluña», revelaba. «Es que a mí la política me da igual. Quiero a España, Cataluña y que sigan siendo del mismo territorio. Pero no va más allá de la política», expresaba la joven. Ante lo poco que habían congeniado, la decisión final para los dos estaba clara. Pero por si acaso, Aleix se encargó de esclarecer los motivos por los que no quería una segunda cita. «Yo me siento muy bien hablando en catalán y tú me has destacado que hablas mucho castellano y por eso no tendría una segunda cita».