El exceso de turismo sigue teniendo consecuencias en Italia, uno de los primeros destinos del mundo. Venecia intentó aliviar sus canales saturados el pasado verano imponiendo una entrada de 5 euros para los visitantes de un día, mientras que el Parque Arqueológico de Pompeya estableció el pasado 15 de noviembre un límite de 20.000 visitantes por día (el año pasado recibió cuatro millones de turistas). A esa lista de intentos de contener la avalancha se quiere sumar Florencia . La alcaldesa Sara Funaro y el concejal de Turismo Jacopo Vicini anunciaron el día 12 un plan de diez puntos para favorecer la sostenibilidad al mismo tiempo que llegaban a la ciudad los líderes del G7. Florencia, con unos 367.000 habitantes, recibió en 2023 casi nueve millones de visitantes que pernoctaron allí y a 1,5 millones de excursionistas de un día. La propuesta de la ciudad incluye la prohibición del uso de las típicas cajas fuertes donde los propietarios dejan las llaves de los alojamientos turísticos situados en el centro histórico de la ciudad, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Si las medidas se aprueban finalmente tampoco se podrán utilizar con fines turísticos «vehículos atípicos» (carros de golf, rickshaws y otros), ni los altavoces con los que se hacen oír los guías en las calles. «un fenómeno perturbador para quienes viven en nuestra ciudad». Algunas de esas cajas fuertes de los pisos turísticos han aparecido estos días tapadas con pegatinas rojas con el mensaje: «Salvemos Florencia». «Lo que siempre recordamos es que el 95 por ciento de la presencia turística en Florencia se concentra en cinco kilómetros cuadrados, que son los que más sufren la presión turística«, afirma Jacopo Vicini, concejal de Desarrollo Económico y Turismo, en un comunicado del Ayuntamiento. «El mensaje que queremos dar es que nos preocupamos por nuestra ciudad y nos importa que Florencia pueda ser atractiva pero sobre todo habitable para los residentes . Con estas medidas protegemos Florencia, tenemos el objetivo principal de garantizar que nuestra ciudad pueda mantener sus raíces, su naturaleza y su identidad«, afirmó la alcaldesa. La propuesta ya ha sido aprobada, pero algunas de las medidas que incluye requieren modificaciones en la normativa municipal antes de entrar en vigor, algo que previsiblemente ocurrirá a principios del próximo año. Durante los actos del G7, la ministra italiana de Turismo, Daniela Santanchès, dejó a los periodistas su opinión al respecto. «Usamos esta palabra, sobreturismo, cuando es un problema de muy pocas ciudades . No es un problema generalizado, al contrario, debemos hacer todo lo posible para traer más turistas a nuestra nación, más turistas de calidad. Dicho esto hay que aprender a gestionar los flujos turísticos, hay que trabajar en esa dirección, trabajando en la desestacionalización y ampliando la oferta turística. Me gustaría que estuviéramos juntos no para hacer titulares o propaganda sino para encontrar soluciones. También estoy de acuerdo en que estas cajas no son bonitas, pero ¿cuál es la solución? ¿Cómo podemos organizarlo? De lo contrario, todos somos buenos para aparecer en los titulares«.