El nuevo ministro de Defensa de Israel, Israel Katz , ha recalcado este martes que «no habrá alto el fuego ni tregua en Líbano» hasta que no se hayan materializado «los objetivos» israelíes, en el marco de la invasión desatada hacer cerca de mes y medio en el país vecino. «En Líbano no habrá el alto el fuego ni tregua. Seguiremos atacando a Hizbolá con toda nuestra fuerza hasta que se logren los objetivos de la guerra», ha manifestado Katz a través de un mensaje publicado en su cuenta en la red social X. Así, ha recalcado que «Israel no aceptará ningún acuerdo que no garantice el derecho de Israel a evitar el terrorismo de forma independiente, garantizando que los objetivos de la guerra en Líbano son cumplidos, incluido el desarmar a Hizbolá, empujarlo al norte del río Litani y permitir que los residentes del norte vuelven sanos y salvos a sus hogares». Katz ha subrayado además que «las poderosas actividades» del Ejército contra Hizbolá y la muerte del secretario general del grupo, Hasán Nasralá , dan «una imagen de victoria», por lo que ha defendido que «las acciones ofensivas deben continuar para seguir debilitando las capacidades de Hizbolá y alcanzar los frutos de la victoria». Las palabras de Katz han llegado un día después de que el ministro de Exteriores de Israel, Gideon Saar , afirmara que se han registrado «progresos» en las conversaciones de cara a un alto el fuego en Líbano, al tiempo que añadió que Israel trabaja para ello junto a Estados Unidos, sin más detalles. Israel desató el 1 de octubre una nueva invasión de Líbano tras varias semanas de intensos bombardeos y ataques contra el país, incluida la explosión coordinada de miles de dispositivos de comunicación utilizados por el grupo libanés, después de más de once meses de combates con Hizbolá en la zona fronteriza. Líbano ha denunciado cerca de 3.200 muertos desde el estallido de las hostilidades el 8 de octubre de 2023. El repunte de las hostilidades se enmarca en los enfrentamientos iniciados hace más de un año, después de que Hizbolá atacara territorio israelí tras los ataques perpetrados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas, que llevaron a Israel a desatar una cruenta ofensiva contra la Franja de Gaza, donde han muerto ya más de 43.600 personas.