La granada es una fruta deliciosa, rica en antioxidantes y llena de beneficios . Además, podemos elaborar deliciosas recetas con granada . Sin embargo, debido a su estructura interna y al jugo que tiende a salpicar, pelarla puede ser todo un desafío. En GURMÉ vamos a contarte el sencillo truco que permite extraer sus semillas de forma rápida y, lo más importante, sin ensuciarse las manos . Con este método, solo necesitarás un cuchillo y una cuchara para liberar cada jugosa semilla en pocos pasos. Gracias a esta fórmula podrás aprovechar todo lo bueno que nos ofrece esta fruta . Y es que, no debemos olvidar que la granada es conocida como una «súper fruta» por sus impresionantes propiedades nutricionales. Cada pequeña semilla está cargada de antioxidantes que ayudan a reducir el daño celular y promueven una piel saludable. La granada es también rica en vitamina C, potasio y ácido fólico, y su consumo regular puede contribuir a mejorar la circulación, reducir la presión arterial y proteger la salud del corazón. Además de ser deliciosa en ensaladas, yogures y como topping en otros platos , la granada es perfecta para preparar zumos y smoothies . Su jugo dulce y ligeramente ácido aporta un toque fresco y exótico, ideal para consumir en cualquier época del año . Ahora, con este truco para pelarla, puedes disfrutar de sus semillas de una manera más práctica y sin complicaciones. ¡Vamos a descubrir cuál es la mejor forma de pelar una granada sin ensuciarse y sin usar las manos! El primer paso es cortar la granada con cuidado , de modo que puedas acceder a las semillas sin aplastarlas y evitando el desperdicio. Sigue estos pasos para preparar la fruta antes de extraer sus semillas: Lavar la fruta: Enjuaga bien la granada con agua para eliminar cualquier impureza que pueda haber en su superficie. Corte en la corona: Observa la parte superior, donde se encuentra la «corona» de la granada. Con un cuchillo, corta en forma circular alrededor de esta corona y retírala suavemente . Esto te permitirá ver mejor las divisiones naturales dentro de la fruta. Corte lateral: Con el cuchillo, haz cortes superficiales a lo largo de la piel de la granada , siguiendo las líneas divisorias que la estructura interna sugiere. La idea es crear segmentos que puedas separar fácilmente después, sin hacer cortes profundos que dañen las semillas. Después de realizar estos cortes, utiliza las manos para abrir la granada en gajos o secciones . Este paso es importante para exponer los granos de forma organizada, lo cual facilitará el proceso de extracción sin romper las semillas ni desperdiciar el zumo. Ahora que tienes las secciones separadas, puedes usar una cuchara grande para golpear la parte posterior de cada segmento . Esta técnica evita que tengas que sacar cada semilla con las manos, lo cual puede resultar engorroso y generar manchas. Para extraer las semillas sin ensuciarte: Coloca un bol grande debajo del segmento de granada que vas a trabajar para que las semillas caigan directamente en el recipiente. Toma una cuchara y golpea firmemente, pero sin demasiada fuerza, en la parte trasera de la sección . Con estos golpes, las semillas irán cayendo solas en el bol, mientras que la piel y la membrana blanca de la granada permanecen en tu mano. Repite este proceso con cada sección hasta que hayas retirado todas las semillas. Este método permite un trabajo rápido y eficiente, minimizando el contacto directo con el jugo. Este método de extraer las semillas con una cuchara tiene varios beneficios. Primero, es rápido y evita que te manches las manos, ya que el zumo de granada puede ser difícil de limpiar y mancha con facilidad . Además, al evitar el contacto directo con las semillas, puedes mantener intacta la estructura de la fruta y reducir el desperdicio de zumo. También es una forma organizada y limpia de trabajar con una fruta que, de otra manera, podría resultar complicada. Si eres cocinillas y te gusta conocer trucos para trocear ingredientes , toma nota de cómo cortar varios tomates cherrys a la vez o de cómo cortar cebollas sin llorar .
