Con motivo del Día Mundial del Enoturismo, que se celebrará el domingo 10 de noviembre, la Ruta del Vino Montilla-Moriles ha preparado un extenso programa de actividades para destacar la riqueza vitivinícola de la región. Este evento busca acercar a los visitantes al proceso de elaboración del vino y mostrar la historia, cultura y relevancia social de una actividad agroindustrial que tiene un peso importante en la provincia de Córdoba. El programa de actividades, que se desarrollará del 1 al 14 de noviembre, ofrece una inmersión en el mundo del vino a través de experiencias que vinculan enoturismo, gastronomía y cultura . Entre las propuestas, destaca la Semana Gastronómica de Espejo en la Taberna La Montillana , donde se conocerán los productos de la localidad y se aprenderán las recetas tradicionales. De esta forma, se crea un tándem perfecto entre la gastronomía local y los vinos de la Denominación de Origen Montilla-Moriles, uniendo las tradiciones culinarias cordobesas con los matices de estos vinos únicos. Además, el programa incluye más de 30 actividades tan variadas como catas de vinos en bicicleta por las tabernas de Córdoba, degustaciones a medida en bodegas, visitas guiadas al cementerio de San Rafael y a las Cisternas Romanas de Monturque en el contexto de las Jornadas Culturales y Gastronómicas Mundamortis, y los Baños de Sonido, Vibraciones y Vino en el Castillo de Montilla. Durante la presentación del programa, el delegado territorial de Turismo, Eduardo Lucena, destacó la importancia de la colaboración entre las entidades públicas y privadas en el desarrollo del enoturismo. Según Lucena, la zona de Montilla-Moriles cuenta con todos los elementos para posicionarse como la «Toscana andaluza» , y el Día Mundial del Enoturismo representa una oportunidad ideal para consolidar esta visión. La iniciativa busca fortalecer el vínculo entre la zona productora y la ciudad de Córdoba , promoviendo el consumo local y el aprecio por los vinos de la provincia. Rafael Llamas, alcalde de Montilla y presidente de la Ruta del Vino, subrayó el compromiso de la organización con la defensa activa de la Denominación de Origen Montilla-Moriles . Según Llamas, este esfuerzo no solo favorece el desarrollo económico y turístico, sino que también contribuye a fijar la población en la zona, revitalizando el tejido social y cultural de los municipios implicados. Inmaculada Luque, representante de Bodegas Alvear, subrayó la importancia de la «pedagogía» en torno al vino, resaltando que eventos como este ayudan a educar al público y a poner en valor el trabajo que las bodegas de la región han desarrollado durante décadas. Por su parte, Mara de Miguel, sumiller y enóloga, destacó la necesidad de innovar en las experiencias enoturísticas para atraer a un público diverso, proporcionando a cada visitante una puerta de entrada al mundo del vino Montilla-Moriles.