El aumento del absentismo en los últimos años afecta cada vez en mayor medida a las arcas públicas. La cobertura de la incapacidad temporal supuso desembolsos para la Seguridad Social por valor de 14.094 millones en 2023, y con un incremento del ritmo de gasto del 18% en lo que va de año la cifra para cierre de ejercicio podría acercarse a los 17.000 millones de euros. Sin embargo, las empresas también se ven afectadas igualmente por la tendencia, en términos de coste productivo de estas bajas. Un coste para las compañías que se extiende más allá del absentismo motivado, ya que en el segundo trimestre de 2024 casi 308.000 trabajadores faltaron cada día a su puesto sin una justificación médica, tal y como revela el último informe de absentismo laboral publicado por Randtad. Además, respecto a los 275.410 trabajadores que se ausentaron sin motivo aparente en el mismo periodo de 2021, supone un incremento del 12% en tres años . Y sobre el total de 1,44 millones de personas que no acudieron a su puesto de trabajo de promedio diario en el segundo trimestre, los que no cuentan con justificación médica son el 21%. A rasgos genéricos, el balance de la empresa especializada en recursos humanos advierte de que el nivel de absentismo se situó entre abril y junio en el 6,6% de las horas pactadas , lo que representa un repunte de una décima respecto al 6,5% del cierre del 2023. En el caso del absentismo por incapacidad temporal, o con baja médica, la tasa fue del 5,2%, dos décimas por encima que el registro de finales del pasado año. «El absentismo en el mercado laboral español se mantiene en niveles elevados y no conseguimos una reducción sostenida del mismo, algo que consideramos muy grave, porque eleva los costes de las empresas y acaba reduciendo su competitividad», advierte Valentín Bote , director de Randstad Research, el servicio de estudios de Randstad. Por sectores, la industria concentró en el segundo trimestre el mayor nivel de absentismo, con el 7,1% del total de las horas pactadas, seguido del sector servicios, con una tasa del 6,7%, y de la construcción, con un 5,2%. Según Randstad, el análisis por actividades muestra importantes diferencias. Así, los sectores que presentan un mayor absentismo son las actividades de juegos de azar (11,3%), la industria del tabaco (11,3%), las actividades postales y correos (11,1%) y los servicios a edificios y actividades de jardinería (11%). Por el contrario, los sectores con menor absentismo son las actividades relacionadas con el empleo (2,5%), las actividades jurídicas y de contabilidad (3,3%), los servicios técnicos de arquitectura e ingeniería (3,5%), las actividades inmobiliarias (3,5%) y la edición (3,5%). Por comunidades autónomas, País Vasco fue la que registró en el segundo trimestre una tasa de absentismo más elevada, con un total del 8,6% de las horas pactadas, seguida de Canarias (8,3%), Galicia (7,8%) y Asturias (7,8%). Los menores niveles de absentismo se dieron en Baleares (5,1%), Comunidad de Madrid (5,7%), Andalucía (6,2%) y Comunidad Valenciana (6,2%).