A un siglo de la publicación de la versión definitiva de ' Luces de Bohemia ', el montaje de la obra de Valle-Inclán sigue siendo un reto solo apto para escaladores de gran altura, aquellos a los que ni siquiera les afecta la falta de oxígeno. Valle escribió un texto híbrido, una obra de teatro que escondía una narración fuertemente innovadora y que se debatía entre su imposible o su posible representación escénica. Pero superados los problemas o las excusas de índole técnico, nos damos cuenta que el montaje de 'Luces de Bohemia' hoy necesita de algo más: intensidad humana, complejidad emocional, reflejar todas esas encrucijadas de miseria, mezquindades, historia y política, es decir, bajar al fondo de los reptiles....
Ver Más