Varias horas después de que las primeras fotos e informaciones sobre la muerte del líder de Hamás. Yahya Sinwar, comenzaran a correr por las redes y los medios de comunicación, Benjamin Netanyahu lo confirmó: Sinwar está muerto. «Hoy hemos demostrado que esto es lo que les sucede a todos aquellos que intentan hacernos daño. Y cómo las fuerzas del bien siempre pueden vencer a las fuerzas del mal y de la oscuridad. La guerra continúa y es costosa», ha dicho el líder israelí. Al pueblo de Israel, Netanyahu le dijo que «aún tenemos muchos desafíos por delante» y que «tenemos que seguir siendo resilientes» y «mantenernos firmes en nuestra tierra y seguir luchando». «No detendremos la guerra. Entraremos en Rafah», espetó Netanyahu. Dirigiéndose a las familias de los rehenes, Netanyahu aseguró que Israel seguirá adelante con «todas nuestras fuerzas» hasta que regresen a casa. «Es nuestro compromiso», afirma. Sinwar era una obsesión para el Ejército y el Gobierno israelí desde el 7 de octubre, masacre que el gazatí ideó. El presidente de Israel, Isaac Herzog, elogió al ejército israelí, a la agencia de inteligencia Shin Bet y a los servicios de seguridad por el asesinato del líder de Hamás, Yahya Sinwar. En un mensaje en X, Herzog describió a Sinwar como el «cerebro» detrás de los ataques del 7 de octubre de Hamás contra Israel y por ser «responsable de actos atroces de terrorismo contra civiles israelíes» durante años. Agregó: «Sus malvados esfuerzos se dedicaron al terrorismo, al derramamiento de sangre y a la desestabilización de Oriente Próximo». Según fue anunciando el Ejército, las fuerzas israelíes que dispararon y mataron a los militantes de Hamás en Gaza estaban despejando el área de fuerzas hostiles y no estaban actuando sobre la base de información previa de que Sinwar estaba en el área, según funcionarios de defensa. inwar se había escondido en túneles en Gaza desde el 7 de octubre , intentando evadir la persecución de Israel. Mantuvo contacto con los altos mandos de Hamás durante 11 meses, e indirectamente con los países que mediaban un posible acuerdo de liberación de rehenes y alto el fuego con Israel, principalmente a través de correos, pero había roto el contacto en las últimas semanas. La desaparición de Sinwar supone un gran impulso para el ejército israelí y el Primer Ministro Benjamin Netanyahu, mientras la devastadora guerra en el enclave palestino continúa
