«¡Qué poquísima vergüenza tienes!», le gritaba Carlos Aguilar a Juan Pedro Galán, desde Jerez de la Frontera; del otro lado, en el Puerto de Santa María –ambos en Cádiz–, este vociferaba mientras se iba poniendo colorado un «¡pregúntale a tu madre, que no eres hijo de Juan Galán y las pruebas de ADN así lo han confirmado!». Unas idas y venidas de insultos y acusaciones ante las que Ana Rosa Quintana no ha dudado en pedir a su equipo que los «silenciara, porque así no se puede seguir». Ha ocurrido todo esta tarde en ' TardeAR ', en una conexión en directo, a tres bandas, entre Carlos, Juan Pedro y la periodista, que ha intentado contar la historia que hay tras este relato que podría ser propio de una telenovela . El quid de la cuestión está en que Juan Galán falleció y dejó como herederos a sus tres hijos legítimos, Juan Pedro, Eva y Rocío. El elemento discordante así pareciera que es Carlos, que ha reclamado parte de los bienes que dejó el torero al morir. ¿De cuánto estamos hablando? Ana Rosa Quintana ha apuntado que se calcula que sea una fortuna millonaria, de alrededor de 100 millones de euros. Todo esto entre inmuebles, cortijos, tierras y otros bienes que habría atesorado el diestro a lo largo de su carrera profesional. Casado con Manuela, al fallecer esta quedaron sus vástagos, en teoría, como herederos únicos de esa fortuna. Lo que reclama Carlos Aguilar, ha relatado Quintana durante el programa, es que su madre, Isabel, fue trabajadora interna en el cortijo de Galán y su familia durante muchos años. Ellos mantuvieron una relación y, al fallecer la mujer de Juan, este finalmente oficializó su historia de amor con Isabel. Es por ello, y según ha comentado Carlos, que hay muchos lazos que han hecho, a lo largo de este tiempo, que tanto él como su madre sean merecedores de parte de los bienes y las riquezas que ha conseguido el torero y eso es lo que reclaman. Durante la intervención Ana Rosa Quintana ha dejado claro en varias ocasiones que hay muchas aristas por descubrir y puntos a tener en cuenta. De ahí que todo esto esté en manos de la Justicia. Tanto uno como otro han interpuesto varias demandas para reclamar falsedad documental y otros delitos pero, como insistían en ' TardeAR ', han de ser los juzgados los que valoren la documentación existente. Así se hará el 15 de febrero de 2025 , que es cuando tienen ya una cita para ese cara a cara en persona, no teniendo entre ellos una pantalla de televisión. El enfrentamiento de esta tarde empezó a ritmo lento pero fue subiendo en intensidad conforme iban interviniendo uno y otro. Tanto es así que Quintana se ha visto en la necesidad, como se apunta anteriormente, de silenciar a ambas personas para poder seguir con el programa. ¿Qué ocurrirá cuando lleguen a juicio? Ana Rosa ha prometido a la audiencia que seguirán el caso de cerca para informar de las novedades.
