Lorenzo Caprile es un señor que se ha hecho famoso para el gran público tras su paso por el programa de TVE 'Maestros de la costura'. Pero mucho antes de que esto sucediera, Caprile ya era un nombre con mayúsculas en el panorama de la moda española. El hombre que vistió a los niños en la boda de los reyes de España, Felipe y Letizia, que ha puesto de largo a actrices y es todo un símbolo de elegancia capaz de convertir en icónico el modelo rojo que vistió la reina Letizia en la boda de los herederos de la casa real de Dinamarca abre ahora de par en par las puertas de su universo en una exposición que ofrece la Sala Canal (Santa Engracia, 125) y que estará abierta hasta el próximo 30 de marzo. Una conjunción de trabajo (mucho), cultura (enciclopédica) y buen gusto han llevado a Caprile a convertirse en un referente en el mundo de la moda. Perfeccionista y concienzudo, no repara en esfuerzos cuando se trata de hacer bien el trabajo: sus colaboradores aún recuerdan cómo para vestir a los hijos de las infantas Elena y Cristina en la boda de su hermano el Príncipe Felipe, quiso revivir el espíritu goyesco y siguió instrucciones del equipo investigador del Museo del Traje. Eloy Martinez de la Pera y José Luis Masó Guirao son los comisarios de esta exposición, que en su presentación este lunes se volcaban en explicar su interés en llegar más allá del personaje, hasta la persona: «Que la gente conociera quién es». Para ello, han acudido a sus objetos personales, sus notas e incluso su teléfono, «que no es de última generación», ironizaban. A través de sus vestidos, explican, « vamos a entender que ama la belleza, y es capaz con hilo y aguja crear inmensa belleza». La exposición incorpora más de 120 piezas de alta costura y 30 obras de arte del afamado modisto. «Hacedlo a lo grande, nos dijeron, y no hemos tenido ninguna limitación», recordaban los comisarios. Tras recorrer los varios pisos del antiguo depósito del Canal, que ya albergó en otros momentos otras muestras de grandes de la moda como Pertegaz, Jesús del Pozo o David Delfín, están seguros de que quienes la visiten «van a salir absolutamente enamorados de un personaje que es uno de los mejores modistas de nuestro país actualmente». Una escenografía muy teatral introduce a los visitantes en el universo Caprile y los conduce a través de él. El modisto ha agradecido a la ciudad de Madrid que acogiera muchos años atrás «a dos aventureros chalados, que eran mis abuelos, que llegaron de Italia buscando aquí un futuro mejor para su familia y aquí prosperaron». Caprile ha vestido a la realeza, a la aristocracia, pero también a muchas artistas relacionadas tanto con el teatro como con la música pop. Uno de sus últimos trabajos es el vestuario del nuevo montaje de 'Luces de bohemia' que se estrena en el Teatro Español, una historia eterna que, lamentaba Caprile, «parece mentira que cien años después España siga igual». La presidenta Díaz Ayuso ha recordado las influencias del cine y el teatro en su obra, pero también «por su gran formación e inmensa cultura». En su homenaje, ha aplaudido a Caprile como «ejemplo de mucho trabajo, de bendita normalidad, de talento, de sabiduría», y le ha agradecido ser «un grandísimo embajador de esta industria».
