Mitsubishi Outlander PHEV, un SUV del segmento D, llega en su cuarta generación -tras vende 200.000 unidades de las versiones anteriores- y lo hace con tecnología híbrida enchufable (PHEV) con más de 80 kilómetros de autonomía en modo eléctrico y un precio que en España estará por encima de los 50.000 euros. Exteriormente, la silueta transmite estabilidad y muestra una sólida estructura horizontal con líneas musculosas. En la parte trasera, el estilo hexagonal muestra fuerza, y el diseño horizontal de los faros traseros potencia su equilibrio y su anchura. El interior transmite una sensación de calidad gracias a la artesanía japonesa y la atención al detalle. Bajo el capó, el nuevo Mitsubishi Outlander PHEV monta un propulsor híbrido enchufable de larga autonomía que ofrece una aceleración inmediata combinada con una conducción silenciosa y dinámica. A las prestaciones básicas de un SUV del segmento D, se añade una gama de los más avanzados sistemas de seguridad pasiva y activa. Todo ello, con una garantía de cinco años o 100.000 km. El buque insignia de la marca japonesa se empezará a fabricar a finales de 2024 en la planta de Okazaki. El modelo está disponible en cuatro acabados -Motion, Kaiteki y Kaiteki+ - y ofrece una extensa gama de accesorios para personalizar el vehículo. Tiene hasta 12 opciones de color, cinco bitonos y siete de un único color. El sistema combina un motor de gasolina de cuatro cilindros, dos motores eléctricos de gran potencia y una batería de iones de litio más grande, para aumentar la potencia respecto a la generación anterior del vehículo en aproximadamente un 40%. Por otro lado, la batería de accionamiento tiene ahora una capacidad total de 22,7 kWh, lo que significa que el nuevo modelo puede seguir circulando en modo eléctrico aún más tiempo. Según la prueba oficial WLTP, el modo exclusivamente eléctrico ofrece una autonomía de hasta 86 km en ciclo combinado. El motor eléctrico instalado en la parte delantera genera 85 kW (116 CV)/255 Nm, mientras que la unidad trasera proporciona 100 kW (136 CV)/195 Nm, pero tiene un volumen inferior gracias a una unidad de control del motor integrada, lo que simplifica el conjunto del tren motriz. Aunque los elementos básicos del motor de combustión son similares a los de la generación anterior -2.360 cc, 16 válvulas y DOHC- en el nuevo Outlander se ha introducido la recirculación de los gases de escape, canales de refrigeración ampliados y un colector de escape integrado para aumentar el rendimiento y la eficiencia en el consumo de combustible. La unidad de 100 kW (136 CV)/203 Nm se integra con los componentes electrificados para ofrecer una experiencia dinámica constante, con una potencia combinada de 225 kW (302 CV/400 Nm) y un aumento de la capacidad del depósito de combustible hasta los 53 litros, que incrementa la potencial autonomía total al combinar la conducción en modo eléctrico e híbrido. Todo esto permite que el vehículo sea aún más práctico en las situaciones cotidianas. Por ejemplo, el aumento de la potencia implica que la aceleración de 0 a 100 km/h es ahora mucho más rápida, de 7,9 segundos, lo que facilita las incorporaciones en autopista. El conductor puede elegir entre tres modos de propulsión: eléctrico, híbrido en serie e híbrido en paralelo. Además permite seleccionar entre siete modos de conducción; cada uno de ellos está adaptado para dar respuesta ante cualquier carretera o superficie: Normal, Eco, Power, Asfalto, Grava, Nieve o Barro.