El comercio de proximidad, el de barrio y los establecimientos con solera tienen difícil sobrevivir a los tiempos modernos. Las grandes superficies, las ventas por internet y otros factores los van arrinconando, y a veces salir adelante supone un esfuerzo. Pero como hay que renovarse o morir, y eso también cuesta dinero, el Gobierno regional ha puesto en marcha un plan que incluye, entre otras medidas, ayudas económicas a comercios con solera –con más de 50 años de vida–, para que puedan acometer las obras que necesiten de mejora y aumento de la eficiencia. La consejera de Economía, Empleo y Hacienda, Rocío Albert, estrenó ayer este plan de Revitalización del Pequeño Comercio 2024-2027 con la visita a uno de los locales que se han beneficiado de esta ayuda. Las subvenciones para este proyecto tienen ya operativa la convocatoria para su solicitud, que otorgará hasta 2 millones de euros en proyectos d modernización y digitalización. Con esta política, se trata de aumentar la competitividad de las pequeñas y medianas empresas (pymes), con la incorporación de nuevas tecnologías en sus actividades, explicaron fuentes de Economía. Entre las medidas que contempla esta iniciativa, están las ayudas para acometer proyectos de modernización y digitalización, adecuar los negocios a las necesidades de los clientes y hacerlos más atractivos. En la actual convocatoria de subvenciones, tendrán prioridad los establecimientos con solera, es decir, aquellos con más de 50 años de antigüedad, que cuentan con mayor puntuación a la hora de acceder ellas. La consejera de Economía, Hacienda y Empleo, Rocío Albert, visitó ayer el supermercado Unide Market del distrito madrileño de Fuencarral-El Pardo, que ha acometido una reforma integral con la sustitución del mobiliario y mejorado la eficiencia energética y la señalética interior y exterior. Albert ha explicado que las ayudas de la Comunidad de Madrid tienen una cuantía máxima de 10.000 euros por beneficiario, y están destinadas a sufragar obras de ampliación, transformación y renovación de establecimientos o talleres artesanos, así como parte de los gastos de inversión que conlleve la apertura. Las subvenciones pueden emplearse también para otros fines. Por ejemplo, para la adquisición de equipamiento, maquinaria o mobiliario especializado, así como para instalar equipos informáticos o tecnológicos y software. El plazo para solicitarlas, que ya está abierto, finalizará el 16 de septiembre, y se pueden pedir a través de la web del Ejecutivo autonómico: www.comunidad de madrid.es. Además de estas subvenciones específicamente dirigidas a los comercios con más solera, la consejera puntualizó que el Plan de revitalización del pequeño comercio incluye también otras fórmulas. Por ejemplo, en breve se va a poner en marcha una línea de ayudas dirigidas especialmente a los mercados y galerías comerciales de Madrid. Así lo avanzó la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, durante el debate del estado de la región, que se celebró esta misma semana. Con ellas, añadió, se podrán financiar actuaciones de reforma y rehabilitación, supresión de barreras arquitectónicas, inversiones en sistemas que mejoren la eficiencia energética, y también estudios o análisis previos a la realización de las obras, entre otras. «Desde la Comunidad de Madrid vamos a seguir apoyando al pequeño comercio, a las pymes familiares, para que puedan mejorar su servicio al cliente, competir y mejorar sus rendimientos con el objetivo de contribuir a la continuidad del negocio», remarcó Albert. Esta no es la única medida pensada para el comercio en la región: la presidenta apuntó también otra línea de ayudas, de hasta 10.000 euros por establecimiento, para la creación y mantenimiento de comercios en municipios de menos de 1.000 habitantes. Se trata, explicó la jefa del Ejecutivo, de ayudar a mantener vivos los bares y los supermercados y otros comercios –como panaderías, mercerías, peluquerías, droguerías, ópticas o veterinarios– de los pequeños pueblos, o de contribuir a que se abran otros nuevos.
