Los nuevos estatutos, o la reforma de los que se aprobaron en 2000, es uno de los objetivos prioritarios en estos primeros meses de mandato de la nueva junta de gobierno de la Agrupación de Cofradías de Córdoba, presidida por Manuel Murillo tras las elecciones del pasado 25 de junio . Las propuestas se están elaborando, pero las hermandades ya conocen una parte de los cambios que este procedimiento tendrá con respecto al que se realizó en 2023, y que concluyó con una votación en que el texto no obtuvo el respaldo suficiente al no llegar a las tres quintas partes del censo total de hermandades. Tiene que ver con la votación de las enmiendas, al menos según las primeras intenciones de la Agrupación y que se están manifestando a las cofradías. El método escogido en 2023 fue el de enviar un borrador con la modificación a las cofradías, que tendrían un plazo para emitir alegaciones por escrito. Así lo hicieron muchas de ellas. Eso sí: la misma comisión que elaboró los estatutos decidía si admitía o no las enmiendas que presentaban las hermandades. Muchas de ellas se aceptaron, pero otras muchas se quedaban por el camino, y las cofradías agrupadas ya no podían pronunciarse sobre ellas. Un ejemplo: la modificación proponía que para ingresar en la Agrupación ya no era necesario que la asamblea se pronunciase. Bastaba con la aprobación canónica y la documentación necesaria. Se habría evitado así la negativa a la Quinta Angustia . Una cofradía propuso una enmienda que consistía precisamente en que el ingreso continuase como sigue siendo ahora, pero la comisión la desechó con el argumento de que iba « en contra del espíritu de la nueva norma». Es decir, era parte fundamental de la modificación y no se admitía, cuando otras sí se aceptaron. No llegó entonces a la propuesta que se votó el 10 de octubre de 2023, según un sistema que no habría gustado a los hermanos mayores. El resultado fue de 27 votos a favor, 15 en contra y uno en blanco, cuando hacían falta 31 afirmativos , así que la propuesta no salió adelante. En el nuevo proceso las cofradías sí podrían votar las alegaciones en el mismo acto, de forma que podría salir un texto más consensuado y con más apoyo, al menos según la previsión de la Agrupación de Cofradías. Había temas como el de las hermandades de la periferia que crearon mucho debate, y que en el futuro lo seguirán teniendo. Al menos es lo que ahora se baraja. La impresión del organismo y de las hermandades es que aquella decisión de entonces pudo no estar bien vista y que por lo tanto trajo votos en contra que contribuyeron a que el proyecto no saliera adelante, así que ahora las hermandades están recibiendo el anuncio de que se realizaría de otra forma. Aquella reforma introducía algunas novedades, como la simplificación de la elección del presidente y también creaba disposiciones transitorias que endurecían la entrada en la Semana Santa a hermandades que tuvieran cierto número de nazarenos, entre otras medidas, aunque eso quedaría en manos de un reglamento. Lo que sí es seguro es que hay una cofradía más, los Dolores de Alcolea , que se incorporó en junio, y que también será necesario otro voto afirmativo, ya que habrá que llegar hasta los 32 para superar los tres quintos de mayoría necesaria para el cambio normativo.