Apenas han transcurrido 53 días desde que España tocase el cielo en Berlín, y aún con el eco de aquel exitazo en la Eurocopa resonando, el equipo nacional vuelve a ponerse en marcha en Belgrado. Se inicia una nueva temporada también para el fútbol de selecciones con las dos primeras jornadas de la Nations League , torneo en el que los de Luis de la Fuente también defienden la corona ganada ante Croacia en junio de 2023. Serbia, hoy (La 1, 20.45), y Suiza, el domingo, son los dos primeros rivales en un grupo en el que también está Dinamarca. El objetivo primero, claro, será revalidar ese trofeo dentro de nueve meses. Supondría encadenar tres títulos de forma consecutiva, como en el quinquenio mágico entre 2008 y 2012, con la diferencia de que en esta ocasión se conseguiría con un mismo entrenador. Pero más allá de eso, implica también el inicio de un recorrido mucho más ambicioso, que se pretende culminar en Nueva York el 19 de julio de 2026, fecha de la final del Mundial de Canadá, México y Estados Unidos. Aún queda un mundo para aquello, pero mejor ser previsor. Lo que tiene garantizado Luis de la Fuente es trabajar con tranquilidad hasta entonces. Fue renovado de forma efectiva justo antes de la Euro, y el triunfo en Alemania le ha dejado casi sin opositores. Es el poder de un título. A estas alturas ya nadie se acuerda de la espantada de Brahim. No hay quien reclame a Iago Aspas ni quien saque a pasear la figura de Sergio Ramos. Incluso las ausencias más llamativas de esta última convocatoria, tipo Nacho o Marcos Llorente, han pasado de puntillas en el regreso a Las Rozas. Allí todo han sido risas y buen rollo en el reencuentro de los internacionales, donde permanece el grueso de jugadores que levantó la copa en junio, mermado por varias ausencias obligadas, como Morata, Unai Simón, Mikel Merino o la ya definitiva de Jesús Navas . Todo ello provocará que este primer once posveraniego será, salvo en la defensa, sensiblemente distinto al último que lució en el Olímpico de Berlín. Empezando por la portería, donde David Raya parte con ventaja sobre Remiro y Robert Sánchez y siguiendo por un centro del campo donde no estará, al menos en el primer partido, Rodri Hernández, sancionado por sus cánticos de 'Gibraltar, español' durante las celebraciones del título continental. Zubimendi tendrá su oportunidad. La baja de Morata también abre la puerta a experimentos en la parcela ofensiva, con Oyarzábal o Dani Olmo, cada uno con su perfil, como candidatos a tomar ese testigo. Ha sido un verano de homenajes, eventos y reconocimientos. También de poco trabajo por las apreturas del calendario. Pero nada de eso preocupa a De la Fuente, convencido de que sus jugadores darán la talla en esta reapertura de curso: «Este equipo es insaciable. Queremos seguir creciendo y lo mejor está por llegar. A estos jugadores no cuesta nada motivarlos, están muy implicados», dijo el técnico en la rueda de prensa previa al partido, recién aterrizado el grupo en Belgrado tras entrenar por la mañana en Las Rozas por último vez. Día de vértigo. «Queremos seguir mejorando, aportando nuevos jugadores, nuevos registros… En ese inagotable deseo de ser los mejores». De la Fuente salió a hablar acompañado de Dani Carvajal , quien diez años después de su debut como internacional será capitán por primera vez, justo al cumplir cincuenta partidos con la selección. Y el lateral no podía ocultar su felicidad: «Es algo fantástico, que guardaré en la retina toda mi vida. Mi círculo cercano sabe lo que significa para mí». El estreno pone enfrente a un rival poco conocido. Hace doce años del último duelo ante Serbia, un amistoso en Suiza resuelto con victoria (2-0) poco antes de la Euro 2012. Aquel día debutaron con el equipo nacional tres atléticos (Juanfran, Adrián y Domínguez), además de Beñat y Javi García. Apenas hay más precedentes con una nación heredera, eso sí, de la Yugoslavia que, entre otras cosas, dejó fuera a la selección en los octavos de final del Mundial de Italia 90. El héroe de aquel partido disputado en Verona fue el actual seleccionador de los balcánicos, Dragan Stojkovic, que anotó los dos goles de su equipo. Lleva en el banquillo desde 2021 y hasta ahora ha cumplido. Clasificó a Serbia tanto para el Mundial 2022 como para la Eurocopa del pasado verano, aunque en ambos torneos se marcharon a casa a las primeras de cambio sin una sola victoria que celebrar. Entre medias también se lucieron en la pasada edición de la Nations League, en la que acabaron ascendiendo después de superar en su grupo a Noruega, Suecia y Eslovenia. Ayer no dio demasiadas opciones a su selección. Al duelo llegan sin sus tres jugadores más valiosos. Dusan Vlahovic, delantero de la Juventus, es baja por un problema familiar, mientras que Aleksandar Mitrovic y Sergej Milinkovic-Savic, ambos jugadores del Al Hilal saudí, están lesionados. A cambio, presumen de sus jóvenes más en forma: el central Srahinja Pavlovic, recién fichado por el Milán, o el mediocentro del Atalanta, Lazar Samardzic. En la convocatoria aparece también el exmadridista Luka Jovic, pero su estado no invita al optimismo sobre su participación.
