Regresó la selección. Volvieron los abrazos y las risas en el reencuentro de los internacionales en la residencia y el campo de entrenamiento de Las Rozas. Ambiente distendido después de un verano estratosférico en el que se levantó la Eurocopa y se celebró el oro olímpico de los más jóvenes, y que da pie a un nuevo ciclo con nuevos retos y algún protagonista también de estreno. En el corto plazo, España inicia el camino para revalidar el título de la Nations League con sendos encuentros a domicilio: el jueves en Belgrado, ante Serbia; y el domingo en Ginebra, frente a Suiza. Será la primera piedra de toque para calibrar las opciones ante el objetivo más ambicioso: coser la segunda estrella en la camiseta en el Mundial 2026. Esta vuelta al trabajo viene, más por las bajas obligadas que por gusto del seleccionador, con varias novedades en la convocatoria. Siete de los campeones en Berlín no aparecen en la última lista de Luis de la Fuente. La mayoría, por lesión o descanso, pero hay excepciones. Una de ellas es Jesús Navas, que a sus 38 años decidió poner el punto y final a su carrera internacional dejando un agujero en el lateral derecho. Su hueco lo cubrirá Óscar Mingueza , que pasa por delante de Marcos Llorente o Pedro Porro, las opciones que hasta ahora había utilizado en ausencia del sevillista o de Dani Carvajal. La llamada del jugador del Celta viene motivada por su extraordinario inicio de temporada en el conjunto vigués, donde suma dos goles y tres asistencias en los cuatro primeros partidos de Liga. El vallesano ha destapado, a las órdenes de Claudio Giráldez, su versión más ofensiva y descarada en el carril izquierdo celeste, suficiente para convencer a un De la Fuente que le conoce bien. El actual seleccionador ya contó con Mingueza en las categorías inferiores, donde lo utilizó de forma indistinta como central o como lateral derecho. El riojano se lo llevó a los Juegos Olímpicos de Tokio, donde se logró la plata, aunque el defensa apenas pudo aportar, lastrado por una lesión muscular. Aquella fue, hasta ahora, su última experiencia con la selección. Un mal curso en el Barça, sin la confianza de Xavi Hernández, hizo que le llovieran las críticas. Se decía que no tenía el nivel para vestir de azulgrana. Ni siquiera para jugar en Primera División. Que hasta Messi decía que era muy malo... En su contra tenía también haber sido una apuesta de Ronald Koeman. Todo ello le llevó a ser traspasado al Celta en el verano de 2022. En el cuadro gallego le costó despuntar, aunque la llegada de Rafa Benítez fue sumamente beneficiosa para él. Ahí empezó a desplegar esa faceta ofensiva, hasta entonces oculta, que ahora le ha llevado a la selección absoluta. «Estoy con ilusión, al míster lo conozco y sé que a este equipo no le falta motivación», dijo al llegar a Las Rozas. Mingueza , con 25 años recién cumplidos y estabilidad también en lo personal (fue padre por primera vez hace un año) sabe que está ante una oportunidad de oro, de esas que casi nunca se dan. El lateral derecho ha sido el principal quebradero del equipo nacional en los últimos años, un puesto siempre en cuestión durante las ausencias de Carvajal. Con Navas se alcanzó estabilidad, pero ahora vuelve a abrirse el casting.
