Este pasado mes de julio, Galicia se posicionó como el primer destino turístico del norte peninsular y el séptimo a nivel nacional. Así lo destacó este viernes el ejecutivo autonómico, tras conocerse los datos de las pernoctaciones de viajeros hechos públicos por el Instituto Nacional de Estadística. Un mes en el que la Comunidad registró más de 900.000 viajeros y más de 2 millones de pernoctaciones, superando los niveles prepandemia. El segmento hotelero –hoteles y pensiones– fue el favorito de los viajeros en el mes de julio, acumulando el 62% de la demanda. El 38% restante se corresponde con los alojamientos extrahoteleros : un 18% de los viajeros escogieron la opción del camping para su estancia; un 10%, albergues; un 7%, los apartamentos turísticos; y un 3%, los establecimientos de turismo rural. De esta última modalidad, tan solo los apartamentos turísticos tuvieron mejores datos que en el año anterior, con 41.148 personas, esto es, un 4% más que 12 meses antes. Un tipo de alojamiento escogido sobre todo por españoles, ya que la mayoría de las personas que optaron por esta opción (31.972) residen en el país, frente a 9.176 que viven en el extranjero. En contraposición, la mayor bajada en los establecimientos extrahoteleros se produjo en los albergues, con 167.437 viajeros, un 26,6% menos que en julio de 2023 (cuando fueron 220.839 viajeros). En lo que a su país de residencia se refiere, 98.459 eran españoles y 68.977 eran extranjeros. En los alojamientos de turismo rural y los cámpings, el descenso interanual fue del 5% y del 1,2%, respectivamente. De este modo, atendiendo a las dos modalidades de establecimientos, Galicia se situó en julio como el destino turístico favorito del norte peninsular, y el séptimo en el país. Fueron, en total, más de 900.000 personas las que visitaron la Comunidad. Entre ellas, la Xunta destacó el «comportamiento positivo» del turismo internacional, con más pernoctaciones que el año pasado en todos los establecimientos excepto en los albergues. Asimismo, en los primeros siete meses del año, Galicia registró casi 3,9 millones de viajero s (un 2,2% más), con unas 7 millones de pernoctaciones (un 0,2% más). Datos alentadores en un momento en el que múltiples ciudades, gallegas y nacionales, se plantean cambiar el modelo turístico. Al respecto, este viernes el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, reiteró la posición que su ejecutivo ha mantenido hasta la fecha, rechazando los mensajes de «turismofobia» y apelando a un «turismo con sentido». Lo dijo en una entrevista concedida a Espejo Público y recogida por Ep, en la que, además, aseguró que Santiago tendrá su respuesta a la propuesta de implantar una tasa turística. «Estamos estudiando la propuesta, que nos dieron en agosto después de muchos meses de reclamar, y en septiembre habrá una respuesta. En todo caso, de aprobarse una tasa turística, después cada ayuntamiento tendría que decidir si la hace efectiva o no y también asumir las consecuencias. No es una solución mágica a los problemas», esgrimió. Así, el mandatario autonómico mostró su rechazo a los mensajes de «turismofobia», asegurando que «el turismo con sentido, que es el que queremos hacer aquí, es empleo y riqueza« y que en Galicia «cabe todo el mundo que quiera venir». No ajeno a los comportamientos incívicos de algunos visitantes de los que se han hecho eco los medios de comunicación y las redes sociales, apeló a «cortarlos de raíz», pero, eso sí, teniendo en cuenta que vienen de parte de unos pocos entre «miles» de peregrinos que llegan cada día a la capital gallega. Por su parte, la alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, consideró ayer que su aplicación, además de ser un «clamor social», sería « algo lógico «, porque »no solo hay ciudades grandes a nivel europeo, sino también ayuntamientos pequeños y medianos que ya aplican un impuesto de estadía turística sin ningún problema«.