El uso de los sistemas de retención infantil (SRI) es obligatorio para niños y niñas de hasta 135 cm de altura y recomendable hasta 150 cm. Y ahora, que estamos a las puertas de la vuelta al cole, e incluso desde este mes de septiembre, solo se permitirá la venta de sillas infantiles homologadas bajo la norma R129, también conocida como i-Size. Esto quiere decir que ya no se pueden vender SRI que estén bajo la antigua normativa de homologación R44. O mejor dicho, se pueden seguir utilizando, pero no se puede comercializar con ellos, tampoco en segunda mano. Así, es vital tener en cuenta una serie de parámetros a la hora de para elegir sillita. Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de comprar una sillita nueva es que a partir de ahora se dividen en función de la altura y no del peso, según Norauto. Por ello, habrá que indicar la altura que tiene el niño o niña para que el vendedor pueda ofrecer la mejor recomendación. También es importante que los bebés viajen de forma segura desde el nacimiento y desde el primer momento que salen del hospital. Así, se pueden encontrar sistemas de retención infantil desde 40 cm hasta 150 cm de altura. Igualmente y aunque ya no se pueden vender sillitas bajo la antigua normativa, es primordial comprobar que efectivamente la sillita que se va a adquirir está homologada por la R-129 o i-Size. Esto se puede comprobar en el etiquetado que lleva incorporada la sillita, así como en el manual de información. También es importante valorar la usabilidad que se le va a dar. ¿Es necesario que la sillita pueda girar hacia la puerta para colocar al pequeño más fácilmente? ¿Se va a quitar y a instalar de forma frecuente la sillita? En estos casos, una base puede ser la mejor solución, así como contar con anclajes Isofix para evitar errores en su instalación. También puede ser necesario aprovechar el máximo espacio para colocar otras sillitas en los asientos traseros. Hay que tener en cuenta que deben viajar en los asientos traseros salvo excepciones y que hay sillitas de mayor o menor tamaño. Contar con un respaldo reclinable es muy importante para garantizar la correcta ergonomía y confort, especialmente en viajes largos y cuando los más pequeños duermen en el trayecto. En este sentido, Norauto recomienda comprobar la correcta instalación de la sillita en el vehículo y que el niño o niña esté cómodo y protegido. Para ello, resulta primordial poder probar la sillita en el coche y con el niño o niña sentado. De esta forma, es posible garantizar su compatibilidad y adecuada protección. Por último, es muy importante de igual modo acudir a un centro especializado, en el que ayudarán a tomar la mejor decisión. Así como que las sillitas de coche no son eternas. Y es que hay que renovar el sistema de retención infantil siempre que sea necesario y le quede pequeña al menor. Esto ocurre cuando el niño o niña supera el peso (si el SRI está homologado por la R44) o la altura (si es R-129) indicada por el fabricante de la sillita. También se debe cambiar siempre que el SRI se haya visto involucrado en un accidente de tráfico o se aprecien desperfectos, ya que no ofrecerá una protección adecuada.