El pasado domingo, la muerte de Alain Delon dejó desolado al mundo del cine. El icono francés perdía la vida tras luchar durante años con un linfoma que le apagó lentamente y le llevó a querer solicitar la eutanasia en Suiza hace dos años, donde la decisión es completamente legal. Sus hijos fueron los encargados de comunicar públicamente la noticia, pues, aunque el actor había perdido las ganas de continuar viviendo, su familia y un miembro muy especial fueron su gran apoyo hasta el final. « Alain Fabien , Anouchka , Anthony , así como Loubo , tienen la inmensa tristeza de anunciar la partida de su padre. Falleció pacíficamente en su casa de Douchy, rodeado de sus tres hijos y su familia», decía la carta enviada para transmitir la triste noticia. En la misma son sus tres hijos quienes incluyen a la mascota de Delon en la despedida de la estrella francesa. Hace diez años, Alain adoptó de un refugio a Loubo, un pastor belga malinois que acompañó al actor durante sus últimos años de vida. Era con él con quien expresó en una ocasión que deseaba descansar para siempre, sacrificándolo si hiciese falta para ello. Pero finalmente no será así. La familia de Delon ha asegurado que la vida del animal seguirá a salvo, traicionando así la última voluntad del padre de la familia. En una entrevista para Paris Match hace varios años, Alain Delon expresaba claramente cuál era su deseo de cara al momento de su muerte: si él fallecía antes, quería que su perro fuese «dormido» y depositado junto a él en la misma tumba en el cementerio de casa en Douchy. «Lo pondrá a dormir en mis brazos. Prefiero hacerlo antes que saber que se dejará morir en mi tumba con tanto sufrimiento», dijo explicando que se lo pediría al veterinario. A Delon le causaba mucho dolor pensar en la tristeza que sufriría Loubo cuando él ya no estuviese, pues tenían un vínculo sentimental muy estrecho. «Es mi perro de final de vida… lo amo como a un hijo. He tenido 50 perros en mi vida, pero tengo una relación especial con este. Me extraña cuando no estoy», comentaba apenado. Estas declaraciones han sido rescatadas ahora con su muerte por los seguidores del actor que se han preocupado por el final de la mascota sin saber finalmente la decisión que había tomado su familia. El perro goza de muy buena salud y los hijos del actor no podían sacrificarle aún sabiendo que era un deseo en vida de su padre. Ha sido la fundación Brigitte Bardot la encargada de comunicar expresamente la decisión tomada respecto al posible sacrificio de Loubo. «Muchos de vosotros nos habéis enviado mensajes sobre el futuro de Loubo, el perro de Alain Delon. Por supuesto, no será sacrificado», aclaraba la institución con un comunicado en su perfil de X. Será su propia familia quien cuidará del animal, quien, a pesar de perder a su dueño, está feliz. Sus familiares sí cumplirán otro deseo del actor, el referente al de su funeral. Alain Delon será enterrado el próximo sábado en una ceremonia íntima que se llevará a cabo en los terrenos de la mansión en Douchy donde vivía. Tal y como pidió el intérprete, será inhumado junto a los restos de sus otras mascotas, en el mismo sitio donde descansan. En numerosas ocasiones había manifestado que por nada del mundo querría recibir homenajes nacionales, y el Estado francés no los realizará. La capilla en la que descansará eternamente, fue mandada construir por el propio actor en los terrenos próximos a la vivienda en la que residía desde hacía décadas para preservar los restos de sus 35 mascotas anteriores, a las que quería como si fueran sus hijos.
