El incendio forestal declarado el pasado domingo en la Sierra de Andújar (Jaén), «ha afectado a zonas de nidificación de especies de aves amenazadas», según SEO/BirdLife , entidad que ha destacado que las en torno a 800 hectáreas dañadas se sitúan en «un paraje ecológico de gran interés para la flora y la fauna del sur peninsular». Así lo ha indicado este miércoles en una nota la citada organización, desde la que se ha valorado el «gran trabajo» del Plan Infoca en un fuego que quedó controlado este martes a las 19,50 horas, al tiempo que ha analizado las consecuencias que puede tener en la conservación de especies de aves amenazadas. En una primera valoración de SEO/BirdLife, la superficie calcinada ha afectado a un mínimo de dos territorios de águila imperial ibérica, una especie endémica de la Península Ibérica en peligro de extinción. Asimismo, ha dañado una zona de nidificación de águila real , que aun siendo una rapaz que suele criar en cortados rocosos, anidaba en los pinos de la zona afectada. En el caso del buitre negro, el incendio llegó a quemar la zona de campeo de la especie, teniendo en la Sierra de Andújar la única colonia reproductora de la provincia de Jaén. Aparte de estas especies de rapaces, la zona donde se ha producido el fuego es muy importante para la conservación de las aves, incluida en la zona IBA 208 Sierra Madrona - Sierra de Andújar. «Según apuntan los informes del Infoca, la mayor parte afectada por el fuego se corresponde con zona de monte y bosque . Sin embargo, también se han visto afectadas áreas de cultivos de olivar. En este sentido, se da la circunstancia de que parte de una de las fincas en proceso de certificación a Olivares Vivos ha sido afectada», ha afirmado. En este caso, los trabajos de evaluación de biodiversidad constataron el gran valor de la zona afectada para la biodiversidad en general y para las aves en particular. De hecho, en esta finca, se realizó uno de los censos de aves donde se encontró uno de los números altos en cuanto a cantidad de especies. En concreto, se censaron 28 especies, entre ellas, algunas ligadas a ambientes forestales , no agrarios, como el pico picapinos o el herrerillo capuchino. También cabe mencionar que en esta finca olivarera destacó el increíble número de polinizadores que tenía antes del incendio. Los niveles de colonización en los nidales de insectos instalados por Olivares Vivos han sido también de los más altos registrados en cuanto a ocupación de polinizadores (abejas silvestres). SEO/BirdLife ha resaltado que la Sierra de Andújar y su paraje del embalse del Encinarejo son territorios especialmente importantes tanto para la protección de las aves como para la biodiversidad ibérica en su conjunto. En este punto, ha explicado que es la zona principal de asentamiento del lince ibérico , recientemente sacado de la categoría de en peligro de extinción para pasar a vulnerable, y otras especies, menos emblemáticas, pero igualmente importantes como el lagarto ocelado o la víbora hociduda, en estado casi amenazado, u otras especies de reptiles, anfibios y pequeños mamíferos que tienen difícil escapatoria en los incendios forestales. «Dada la importancia de este territorio para la conservación de nuestro patrimonio natural, se debería prestar especial atención a la restauración de la zona. Es una oportunidad para que se regenere el monte mediterráneo primigenio de este paraje y que, con sus especies típicas como lentiscos, madroños, encinas y alcornoques , sustituya a los pinares de repoblación», ha considerado. También es una oportunidad, a su juicio, para retomar las actuaciones de fomento del conejo de monte en la Sierra de Andújar, que ha bajado su densidad y que «beneficiaría a las especies emblemáticas anteriormente mencionadas como el lince ibérico o el águila imperial ibérica», según ha apuntado Francisco Martín , técnico de SEO/BirdLife. Por otra parte, desde esta entidad se ha manifestado que, aunque en los bosques mediterráneos los incendios forman parte de sus procesos ecológicos propios, la nueva realidad climática a la que se enfrenta Andalucía aumenta la gravedad y peligro que presentan. Igualmente, es crucial aumentar las labores de prevención, la vigilancia e incidir en la concienciación social, dado que la mayoría de estos fenómenos son provocados. «Aunque la eficaz acción de los profesionales del Infoca han evitado un mal mayor, cada incendio es una llamada de atención para mejorar la gestión forestal de nuestro patrimonio natural », ha puesto de relieve. De este modo, la diversificación de la masa boscosa y de matorral, el fomento de los aprovechamientos tradicionales del monte que reduzcan la biomasa y favorezcan su biodiversidad y el mantenimiento de las zonas rurales y, por supuesto, la continua formación y el apoyo de a los profesionales de la gestión forestal y la extinción de incendios «deben ser actuaciones para la mejora continua frente a la amenaza de los incendios». «No podemos olvidar que el trabajo en el monte no sólo es importante en los meses estivales . La prevención es la primera herramienta en la lucha contra incendios. Reforzar y mejorar las labores de mantenimiento y vigilancia de nuestros bosques y extremar la prudencia de la ciudadanía en su aprovechamiento y disfrute son la clave», ha asegurado el delegado de SEO/BirdLife en Andalucía, José Eugenio Gutiérrez.
