El apuñalamiento al padre del futbolista del Barça Lamine Yamal ha copado en los últimos días la actualidad en torno al equipo azulgrana. Mounir Nasraoui fue atacado por un grupo de personas en su barrio de Rocafonda, en Mataró, y trasladado grave al hospital, aunque ya se encuentra sano y salvo de vuelta en casa. De hecho, ha reaparecido por los sitios que frecuenta habitualmente en la barriada y el programa 'Y ahora Sonsoles' de Antena3 ha podido recoger sus primeras impresiones a las puertas de un bar de Rocafonda en el que es habitual ver al padre de Lamine Yamal. Mounir ha querido tranquilizar a todo el mundo y asegurar que ahora es momento de «recuperar» su vida , al tiempo que no dudaba en levantarse la camiseta blanca que portaba y enseñar las heridas producidas en el ataque. El padre del futbolista aún lleva un gran apósito en el pecho que cubre las heridas por arma blanca de mayor gravedad, aunque junto al vendaje se pueden obsersar algunas secuelas. El ataque el padre de Lamine Yamal se produjo el pasado miécoles 14 de agosto alrededor de las 21.00 de la noche después de una discusión previa en el barrio. Cuatro personas fueron detenidas, de las cuales una fue enviada a prisión como presunto autor material de la agresión. Por su parte, el futbolista ha seguido muy de cerca la evolución de su padre y las cámaras pudieron captarle cuando acudió al hospital de Can Ruti a visitarlo. Sin embargo, este suceso no impidió que el delantero estuviera presente con el Barça en el debut liguero de este sábado ante el Valencia que se saldó con victoria por 1-2 para los de Flick en su visita a Mestalla y en el que todos estuvieron muy pendientes de su joven compañero.
