Nacho Palau no puede más y después de interponer una demanda contra su antigua pareja, Miguel Bosé, ahora se sienta en el plató de 'De Viernes' para ajustar cuentas con el cantante y advertirle: «Los niños deben estar juntos». El escultor emprendió hace días una batalla legal contra Miguel Bosé e interpuso una demanda contra el cantante por impedirle ver a sus dos hijos no biológicos . Ahora pretende dar un paso más y revelar, según parece, los motivos por los que los niños no pueden permanecer junto a su antigua pareja. Dicen que Nacho Palau tiene el objetivo de « desenmascarar a Miguel Bosé » y el primer avance del programa presentado por Santi Acosta y Bea Archidona ha sido demoledor, exponiendo notablemente al artista. «Mi relación con Miguel ahora es nula, cero. Judicialmente, los niños tienen que estar juntos, eso él lo tiene que respetar sí o sí. Lo que pasa es que él hace lo que le da la gana siempre », es una de las lindezas que aparecen en el adelanto. El escultor afirma que la situación actual «ha influido mucho en la relación que hay entre nuestros hijos y entre nosotros», dejando claro que ha notado una gran diferencia en el trato que tienen los niños con él en la actualidad en comparación con años atrás. Nacho Palau tampoco se ha cortado al responder con toda rotundidad a la pregunta sobre la posibilidad de que Miguel Bosé siga enamorado de él. « Lo he podido pensar, sí », ha afirmado pensarlo dos veces. Además, durante su esperada intervención televisiva ha aclarado lo que verdaderamente siente por Miguel Bosé . «La verdad: pena», ha resumido para cercenar todas las posibilidades de una hipotética reconciliación. Nacho Palau y Miguel Bosé se conocieron en una famosa discoteca de Valencia cuando el cantante tenía 37 años y el escultor apenas contaba con 19. La diferencia de edad no supondría ningún problema para comenzar una relación que duraría más de 20 años. Muy poco después de conocerse, Nacho Palau decidía dejar su vida de Valencia para mudarse junto al cantante al chalé que este tenía en Somosaguas. Incluso a bandonó su carrera profesional para acompañar a Miguel Bosé en sus giras. En 2012, y en medio de múltiples rumores de infidelidades por parte del artista, la pareja tomaba la decisión de ser padres por gestación subrogada . Así nacieron Diego y Tadeo, hijos biológicos de Nacho Palau, y Telmo e Ivo, de Miguel Bosé. Las parejas de hermanos apenas se llevan ocho meses de diferencia. Hasta su separación, todos ellos vivían juntos como una gran familia, pero llegaría la ruptura, que acabaría en los peores términos posibles. Ocurrió tras mudarse a Panamá, donde se habían instalado con la intención de compaginar mejor su trabajo con la crianza de sus hijos. Nacho Palau quiso quedarse en el país para poder estar cerca de sus hijos y Miguel Bosé le propuso la posibilidad de volver a España y dejar a su cargo a los cuatro hijos de la pareja, algo que el escultor se negó a hacer, volviendo a España con sus dos hijos biológicos. Aquí comenzó la batalla legal entre el cantante y su expareja, que luchaba para que se reconociera que sus hijos y los de Miguel Bosé son hermanos. Tras no conseguir que el juez así lo estimara, el valenciano lucha ahora por pasar sus vacaciones con todos los menores , como indica la sentencia.
